Los Hermanos de San Juan de Dios, a través del Hospital San Juan de Dios de Santurtzi y el Albergue San Juan de Dios de Madrid están repartiendo alimentos a más de 300 personas (unas 120 familias) en situación de necesidad, «multiplicando sus esfuerzos» durante la pandemia del coronavirus COVID-19.
«Son familias humildes que agradecen de corazón esta ayuda. Por eso, y a pesar de las dificultades provocadas por el Coronavirus, seguimos haciendo todo lo posible para entregarles alimentos», ha señalado el Superior del Hospital San Juan de Dios de Santurzi (Vizcaya), el hermano Mariano Bernabé.
Según ha explicado, son conscientes de que la crisis del COVID-19 «va a dejar a muchas familias afectadas». «Por eso, ahora más que nunca, los programas de entrega de alimentos son fundamentales», ha añadido. El Hospital San Juan de Dios de Santurzi se constituyó en 2013 como punto de distribución del Banco de Alimentos, gracias a lo cual proporcionan comida a unas 90 familias en la zona urbana asignada por el Ayuntamiento de la ciudad.
«Son los trabajadores quienes están haciendo las entregas de alimentos, ya que para reducir cualquier riesgo de contagio y exposición los voluntarios no están viniendo. En estos momentos difíciles, el personal del hospital está demostrando su gran solidaridad para que nadie se quede sin alimentos e incluso estamos haciendo el reparto a domicilio a aquellas personas que no pueden desplazarse», ha precisado Bernabé.
Por su parte, el trabajador social del Albergue San Juan de Dios de Madrid Miguel Lozano explica que «muchas» de las familias que atienden «se han quedado sin ningún tipo de ingreso porque dependían de la economía sumergida y, ahora, también comienzan a necesitar otros bienes como papel higiénico o productos de limpieza, vitales en estos momentos de confinamiento».
Desde 2013 este dispositivo tiene en marcha el programa ‘Más familia’ a través del cual entrega bolsas de comida a familias en situación de vulnerabilidad social, generalmente familias con todos sus miembros desempleados de larga duración y sin ingresos económicos. Ahora, el Albergue San Juan de Dios está duplicando esfuerzos para seguir entregando alimentos y evitar posibles contagios.
«Hemos trasladado la recogida a otro espacio para cumplir las medidas de prevención. Se han puesto marcas de separación en el suelo y se proporciona gel y guantes a las familias a la hora de realizar la recogida. Los trabajadores estamos actuando con mucha precaución y todos vamos con equipos de protección individual. Nos están llegando cada vez más familias y estamos haciendo un gran esfuerzo ya que por ahora y por seguridad no nos están ayudando los voluntarios», ha explicado Lozano.
Después del confinamiento, prevén que habrá muchas personas que necesiten ayuda. En este sentido, la coordinadora de la Obra Social Hermanos de San Juan de Dios-Provincia de Castilla, Susana Oñoro, ha puntualizado que «esta crisis va a afectar significativamente a las personas que ya se encontraban en situación de vulnerabilidad y a nuevos sectores de la población».
«Antes de la crisis del COVID-19 en España casi 3 millones de personas vivían con menos de 342 euros al mes, y alrededor del 6,4% de la población española sufría pobreza severa. Estas cifras, lamentablemente, aumentarán con esta crisis», ha indicado.
Entre otras acciones, la Obra Social de los Hermanos de San Juan de Dios, Provincia de Castilla, apoya cuidando a los enfermos en sus momentos más difíciles, ofreciendo alimentos a familias vulnerables y protegiendo y acompañando a mayores, personas sin hogar, personas con discapacidad, personas con adicciones y personas con problemas de salud mental en sus centros.
