Moreno afirma que no hay «ninguna grieta» entre PP y Cs en su Gobierno, aunque a veces haya «opiniones diferentes»

El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, ha querido dejar claro este miércoles ante el Pleno de Parlamento que no hay «ninguna grieta» entre PP-A y Ciudadanos (Cs) en su Gobierno, aunque a veces haya «opiniones diferentes».

Así se ha pronunciado Moreno durante su debate, ante el Pleno del Parlamento, con el portavoz de Vox, Alejandro Hernández, quien ha considerado que, ante la posición de Ciudadanos (Cs) a nivel nacional cerrando un acuerdo con el Gobierno de Pedro Sánchez para apoyar la prórroga del estado de alarma, ese partido está poniendo «en tela de juicio la estabilidad de la Junta por mero tacticismo».

«El Gobierno andaluz disfruta de buena salud», según ha sentenciado Moreno, quien ha indicado que no hay «ninguna grieta» entre PP y Ciudadanos y que a ambas formaciones las une «algo muy poderoso, como es la defensa de los intereses de Andalucía». «Es verdad que a veces tenemos opiniones diferentes, pero eso es parte de la propia pluralidad y diversidad entre dos formaciones políticas», ha dicho.

Hernández ha insistido en que la posición que van a mantener hoy PP y Ciudadanos en el debate sobre la prórroga del estado de alarma, esas «contradicciones», ponen «en juego la estabilidad» del Gobierno andaluz, «algo muy peligroso» en la actual coyuntura.

Moreno ha respondido a una pregunta de Hernández sobre las relaciones de la Junta con el Gobierno central, ante lo que ha manifestado que, sin duda, esas relaciones son «mejorables», sobre todo, porque el Ejecutivo nacional tiene que contar más con las comunidades autónomas a la hora de tomar decisiones. Ha recalcado que ante una crisis como la que estamos viviendo, la colaboración y la cooperación entre administraciones es fundamental, y ha dicho que para el Gobierno andaluz, los intereses de los andaluces siempre han estado por encima de cualquier otro interés.

Ha dicho que él tiene la obligación de mantener relaciones institucionales fluidas con todo el mundo, y de manera especial con el Gobierno central, lo que no significa «sumisión» por parte de la Junta. Ha dicho que no van a parar de reclamar al Ejecutivo nacional todo lo que creemos que es bueno para Andalucía y lo que nos corresponde.

Moreno ha asegurado que él es crítico con el Gobierno central, sobre todo, a la hora de reprocharle que no cuente con las comunidades a la hora de tomar decisiones. Ha mostrado además su preocupación por los criterios que va a aplicar el Gobierno para el reparto de los 16.000 millones de euros del nuevo fondo para las comunidades, ya que parece ser que la población va a dejar de ser el criterio «legendario» que era y esta tierra puede llegar a perder hasta 600 millones.

Por su parte, Alejandro Hernández ha lamentado la forma que tiene la Junta de asumir lo que está haciendo el Gobierno central, sin llegar a advertirle de que todo «tiene un límite», sobre todo, cuando están en juego vidas y empleos de los andaluces. Ha criticado que Moreno no se haya planteado pedir la dimisión de Pedro Sánchez.

«Usted se ha quejado de todo», según ha dicho Hernández al presidente, refiriéndose a las quejas de la Junta sobre la falta de recursos financieros, de material sanitario, de test, o de transparencia por parte del Gobierno andaluz. Sin embargo, en su opinión, pese al «caso omiso y al ninguneo» del Gobierno a la Junta, no ha habido por parte de ésta una «respuesta contundente».

Ha planteado a Moreno si se ha preguntado cuánto «daño» tienen que hacer Sánchez y Pablo Iglesias a Andalucía para «romper el silencio complaciente con el que se analizan» las relaciones con el Gobierno central.