Un varón que entró a Marruecos por el «pasillo humanitario» de Melilla da positivo en Covid-19

Uno de los 130 marroquíes que salieron el viernes de Melilla hacia Marruecos ha dado positivo en Covid-19. Se trata de «un hombre mayor» que estaba acogido en la ciudad española, que ha sido evacuado desde el complejo hotelero de Saidía, donde han sido llevados a pasar la cuarentena tras dos meses bloqueados en Melilla, a un hospital de la zona para hacerle más pruebas sobre el Covid-19.

En declaraciones a Europa Press, el consejero de Salud Pública, Mohamed Mohand (PSOE), ha asegurado que esta persona no ha estado acogida en los centros de acogida provisional de la Ciudad Autónoma, como son la Plaza de Toros y el complejo V Pino. Mohand apunta a la posibilidad de que esta persona haya estado residiendo en alguna vivienda particular de Melilla.

El consejero socialista asegura que han repasado varias veces las listas de acogidos en estas dos instalaciones, donde hay acogidas más 300 personas de origen marroquí que no tienen hogar en Melilla, y no aparece la identidad de este «hombre mayor» natural de Taourit (Marruecos).

Tras un primer test que le realizaron el sábado en el complejo hotelero tras llegar desde Melilla el viernes, donde guardarán un confinamiento obligatorio de 14 días, el varón dio positivo en Covid-19 aunque se le harán más pruebas para confirmar este dato.

A raíz del positivo detectado en Saidía, se han extremado la vigilancia en el complejo hotelero para evitar al máximo el contacto entre sus inquilinos durante la cuarentena que deben seguir y evitar así contagios

Los 200 marroquíes que cruzaron la frontera entre Melilla y Marruecos están siendo sometidos a pruebas médicas, desde que fueron recibidos por personal sanitario en el propio autobús que les trasladó desde Beni-Enzar a Saidía y durante su estancia en el hotel.

El reino alauí, tras comunicárselo a España, accedió el viernes 15 de mayo a abrir un «pasillo humanitario» para permitir el regreso de parte de sus nacionales atrapados en Melilla, tras decidir unilateralmente el cierre de fronteras con Ceuta y Melilla el 13 de marzo por la crisis del coronavirus. Hasta ahora han pasado 200 pero se estima que en la ciudad española aún permanecen otros 500 marroquíes que también desean regresar a sus hogares.