La Coordinadora 25S mantiene su protesta frente al Congreso a pesar de la prohibición

La Coordinadora 25S, que agrupa a diferentes colectivos de izquierda y extrema izquierda, y que se creó para organizar las concentraciones para rodear el Congreso en 2012, mantiene la concentración que ha convocado para este miércoles a las 12.30 horas frente a la Cámara Baja «contra el avance del fascismo y la brutalidad policial», a pesar de la prohibición de la Delegación del Gobierno de Madrid.

«Con responsabilidad, mascarilla, guantes y con distancia social, pero firmes en la lucha contra el recorte de nuestras libertades y derechos. Mañana a las 12.30 horas, en la Plaza de las Cortes de Madrid, contra la Ley Mordaza y la brutalidad policial», ha afirmado el colectivo en uno de los varios mensaje en Twitter, recogidos por Europa Press, con los que está llamando a participar en la protesta de este miércoles.

Además de mantener esta concentración, la Coordinadora 25S ha convocado a las 9.15 horas frente al Congreso una comparecencia ante los medios de comunicación para denunciar que se trata de la segunda protesta que les prohíben –la primera fue la que convocaron para el 23 de abril para pedir la dimisión del ministro del Interior, Fernando Grande Marlaska– y para anunciar las nuevas acciones que están preparando.

A este respecto, la plataforma ha emitido un comunicado en el que ya hacen «un llamamiento a la reflexión sobre lo que realmente está pasando, y a trabajar desde ya en la organización de una gran manifestación del conjunto del movimiento popular madrileño».

«UN ESTADO DE EXCEPCIÓN ENCUBIERTO»

Asimismo, acusan al Gobierno de haber impuesto «un Estado de Excepción encubierto bajo el paraguas de la lucha contra la pandemia», y critican que «mientras deniegan manifestaciones y se multa y detiene al pueblo trabajador, toleran múltiples concentraciones de la extrema derecha». A este respecto, sugieren que «se podrían pensar» que al Gobierno le interesa «una imagen en la que la única oposición es la extrema derecha».

Por ello, avisan, «sobre todo a la base progresista que apoya a este Gobierno», de que se está propiciando «un juego peligrosísimo y gasolina para el avance del fascismo». Y se preguntan si este miércoles se comprobará «definitivamente como este Gobierno usa discrecionalmente la fuerza policial según el signo de las manifestaciones».

«Una democracia saludable tiene que permitir el desarrollo del movimiento progresista en la calle. Es la única fuerza capaz de confrontar con el fascismo», reclaman, al tiempo que insisten en que su convocatoria «contempla todas las medidas de seguridad, un número limitado de personas» y «distancia física».

Así lo plasmaron también en el escrito que remitieron a la Delegación del Gobierno en Madrid el pasado día 13 de mayo, al que ha tenido acceso Europa Press, en el que detallaban que asistirían 50 personas, que se ubicarían «guardando las distancias físicas de seguridad sanitaria», y que además llevarían «mascarillas y guantes».

DELEGACIÓN ARGUMENTA QUE LOS CONTAGIOS SON «MUY PROBABLES»

No obstante, la Delegación de Gobierno prohibió la protesta, argumentando que la limitación del derecho de manifestación, recogido en la Constitución, está justificado en este caso por las «consecuencias sanitarias» que puede tener la concentración y que «pueden afectar, casi con toda seguridad, no sólo a los manifestantes, sino también a las personas que puedan tener accidentalmente contacto con ellos».

«En las circunstancias actuales, es un hecho notorio que es muy probable que se puedan producir contagios entre las personas participantes que luego puedan extenderse entre sus círculos de amistad, profesionales y familiares, incrementando de esta manera la crisis sanitaria por más que se adopten medidas de seguridad», defiende la Delegación en su escrito, al que ha tenido acceso Europa Press.

Aunque dejan claro que el estado de alarma no implica que el derecho de reunión, recogido en el artículo 21 de la Carta Magna, haya quedado suspendido, sí argumentan que «la propia Constitución introduce limitaciones para su ejercicio», así como el Convenio Europeo para la Protección de los Derechos Humanos, que establece que «la protección de la salud» es un motivo para restringirlo.

«Es evidente que los criterios para la celebración de manifestaciones no pueden en ningún caso ignorar la situación de grave crisis sanitaria en la que se encuentra España», defiende la Delegación del Gobierno en Madrid.

Aún así, la Coordinador 25S no entiende la prohibición de la concentración y por ello, además de la comparecencia ante los medios de las 9.15 horas, siguen llamando a participar en la concentración de las 12.30 horas, para protestar, entre otras cosas, contra la «permisividad con las movilizaciones de la derecha» y contra el uso de la «mordaza» contra «el malestar social que viene».

«Se agrava la situación socioeconómica con 4 millones de trabajadores en paro o ERTEs, algunos todavía que ni los han cobrado, ya hemos visto como crecen las colas para acceder a comida en bancos de alimentos», denuncian, y defienden que «esta situación requiere respuesta».