El expresidente del Gobierno José María Aznar ha asegurado este jueves que la situación de la economía española apunta a una «hecatombe» y ha pronosticado «muchos problemas sociales». A su entender, el Gobierno de coalición de PSOE y Unidas Podemos les ha llevado «otra vez a la España de las colas de hambre».
En una entrevista en la cadena Cope, recogida por Europa Press, Aznar se ha mostrado pesimista sobre el futuro económico y ha señalado que esta misma semana el gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, desgranó en el Congreso de los Diputados la situación de «máxima vulnerabilidad» de España.
Aznar ha señalado que están en un estado de «máximo riesgo» para los españoles desde el punto de vista de las libertades democráticas y de la economía. De hecho, ha indicado que lo que le viene a España desde el punto de vista económico y social es una situación «extremadamente peligrosa», algo que ha achacado a la crisis del coronavirus y a «errores anteriores muy graves».
«UN AUTÉNTICO DESASTRE ECONÓMICO Y SOCIAL»
En este sentido, ha afirmado que España «va a vivir un auténtico desastre económico y social» porque su situación es «enormemente vulnerable». Aunque ha dicho que los españoles tienen capacidad para superarla, ha advertido de que costará «mucho salir adelante» si no se encuentran «las fórmulas políticas adecuadas».
Aznar ha advertido de que cualquier ayuda que reciba España de la UE será «condicionada» al no considerar «responsable» al Ejecutivo español, algo que, a su juicio, es una situación «realmente triste». Además, ha señalado que el fondo de 500.000 millones promovido por Alemania y Francia no va a ser dinero «regalado» sino que «cuanto mayor sea el riesgo del país», «mayor será el condicionamiento».
«La situación de la economía española es una situación de hecatombe, catastrófica», ha aseverado, para añadir que a España la van a «condicionar desde fuera» al no considerarla «responsable» para actuar. A su entender, eso demuestra «incapacidad» y es «realmente triste».
«MUCHOS PROBLEMAS SOCIALES»
Además, el expresidente del Gobierno ha señalado que en España se dan todas las condiciones para que pueda haber «muchos problemas sociales» porque hay «mucha gente sufriendo. «Vivimos, y quien nos lo iba a decir, otra vez hemos vuelto o nos han traído otra vez a la España de las colas del hambre, de las bolsas de comida», ha manifestado.
En este sentido, ha indicado que las clases medidas están «siendo destrozadas» y las pymes están «cayendo por decenas de miles». Por eso, ha dicho que hay que hacer una apuesta «muy fuerte y rápida» por el crecimiento económico y las reformas para salir de esta situación lo antes posible.
En cuanto a las manifestaciones que se están produciendo, ha asegurado que las personas son «libres de manifestarse o no» porque España es «un país libre». Eso sí, ha dicho que hay que evitar «cualquier estallido de violencia» o «estallido social» que «se puede ir de las manos». CUATRO O CINCO AÑOS HACIENDO «MAL» LAS COSAS
Aznar ha asegurado que en España se llevan haciendo las cosas «mal» desde hace «cuatro o cinco años, especialmente muy mal en los últimos dos años». Sánchez llegó al Palacio de la Moncloa en junio de 2018 a través de una moción de censura contra Mariano Rajoy.
En este punto, ha recordado que han tenido «cuatro elecciones generales en cinco años, tres investiduras fallidas, dos mociones de censura, un golpe de Estado (en Cataluña) y una economía «absolutamente descontrolada». Este hecho evidencia, a su juicio, que el país «políticamente no funciona» y va a hacer que España pague un «precio verdaderamente extraordinario».
El expresidente ha señalado que en «circunstancias normales» se debería haber hecho un «gran acuerdo político» entre las principales fuerzas políticas bajo los pilares de la Constitución y la UE que hubiese «forjado unos planes plurianuales para diez o quince años» con fin de reconstruir el país.
Aznar ha agregado que ese acuerdo entre las principales fuerzas hubiese «sido deseable» pero se eligió la «fórmula Frankenstein» y de la «confrontación». Y la salida de esta situación es «muy complicada» y a un «coste altísimo» porque están en manos de «un absoluto irresponsable, acompañado por chavistas, por comunistas y por separatistas».