El sector taurino estudia iniciar acciones legales contra el Gobierno al que acusan de discriminarles en la gestión de la crisis del coronavirus, ya que están excluyendo a sus profesionales de las ayudas al sector cultural y, a nivel ganadero, tampoco se está teniendo en cuenta la peculiaridad de la raza de lidia.
El recién elegido presidente –este mismo miércoles– de la Unión de Criadores de Toros de Lidia, Antonio Bañuelos, y desde la Unión de Toreros, Íñigo Fraile, han confirmado a Europa Press que no solo están estudiando esta posibilidad sino que no descartan «ningún tipo de acción legal» y «ni ninguna vía», no solo la contencioso-administrativa sino la vía penal.
En concreto, han afirmado que el Gobierno, a través del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) ha excluido a toreros, novilleros banderilleros, mozos de espada, subalternos y toreros de las prestaciones extraordinarias para artistas en espectáculos públicos, que es la regulación laboral en la que se encuentran estos, de acuerdo con el Real Decreto 1435/1985 de 1 de agosto, según precisa Fraile.
En este contexto, ha asegurado que el sector «no tiene constancia» de que se haya concedido ayuda a ninguno de estos profesionales, en un sector que tiene en activo a entre 4.000 y 5.000 personas. De hecho, afirma que numerosos profesionales que han solicitado estas ayudas han recibido una contestación del SEPE en la que se informa de que «tras recibir instrucciones pertinentes en relación al régimen de artistas» no tendrían derecho a esa prestación.
«Para poder cobrar esa prestación debe usted estar encuadrado en el grupo de cotización de régimen de artistas y usted está en el grupo de toreros, por tanto, grupo diferente al protegido por la prestación indicada», señala la instrucción del SEPE al colectivo, pese a que legalmente están incluidos en el régimen de artistas en espectáculos públicos, junto con los trabajadores del cine, el teatro, circo, variedades, folclore y música.
Apuntan así directamente a la «voluntad discrecional» del Ejecutivo de sacar al sector de estas ayudas mediante la contestación escrita, y en el caso de que finalmente se incluyera al sector, afirman que las condiciones establecidas para acogerse a ellas son de difícil cumplimiento para la mayoría del sector. «Serían un brindis al sol tal y como están configuradas», ha criticado.
NI EN LA GUERRA SE SUSPENDIERON LAS CORRIDAS: ES «EL MOMENTO MÁS DIFÍCIL»
En esa línea, Bañuelos, en su primer rueda de prensa tras ser elegido este miércoles en asamblea nuevo presidente de la Unión de Criadores de Toros de Lidia ha dicho que acepta el cargo asumiendo que «este es el momento más difícil de la tauromaquia», ya que «ni en épocas de guerra» se han suspendido las corridas en España.
«Queremos que se nos trate como un sector más. Somos miles de personas, entre ganaderos, trabajadores de campo, toreros, banderilleros, rejoneadores, veterinarios y somos el sector dentro de la cultura que más ingresos por el Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA) ingresa al Estado, con 140 millones de euros», ha reclamado.
Bañuelos ha hecho hincapié en las graves repercusiones de la crisis del coronavirus en la tauromaquia a nivel económico, pero especialmente en la incidencia social del COVID-19 porque considera que este año no se celebrarán apenas espectáculos taurinos y puede que el año que viene las condiciones económicas en las que se encontrará el público muchos aficionados tendrán que elegir entre ir a los toros o no hacerlo.
Asimismo, ha acusado al Gobierno de que «ningún ministro» les ha recibido, ni el ministro de Cultura, José Manuel Rodríguez Uribes, a quien han escrito y pedido reunión varias veces en estos meses sin respuesta, ni la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ni el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas.
De Planas afean que, aunque «se ha reunido con todos los sectores, no tenía tiempo» para hacerlo con ellos por lo que –según su versión– trasladó el encuentro al secretario general de Agricultura, Fernando Miranda, quien trató a su ganadería «como una vaca más».
Al respecto de la reunión, ha afirmado que le hicieron hincapié en la importancia del toro para mantener un hábitat centenario, para la biodiversidad y sus beneficios al medio ambiente y porque desde el punto de vista alimentario la carne de lidia es «ecológica» y «muy sana». «Nos dijo que ya recibiríamos las ayudas de la PAC como especie bovina», ha apostillado.
Lamenta así que el Gobierno no está teniendo en cuenta tampoco el impacto y los beneficios ambientales que el sector genera a la biodiversidad, para el mantenimiento de la especie, la supervivencia de las dehesas y los ecosistemas y para generar empleo y turismo rural en «la España vacía a la que tanto mencionan».
Con todo, observa con preocupación la «repercusión social» que 2020 puede suponer a la afición tanto a los espectadores de corridas de toros, como en los miles de fiestas populares que advierten que puede provocar el estar «prácticamente un año en blanco». No obstante, confía en que podrán celebrarse algunas fiestas taurinas, pero más bien escasas corridas de toros.
«Entre los ganaderos el panorama es de desolación total», afirma Bañuelos porque los toros son un producto perecedero que come todos los días. Así, añade ha suprimido cadenas de ganado, con toros que estaban ya comprados y pagados para los festejos, por lo que los ganaderos han tenido que enviar al matadero a miles de toros y vacas.
Esa es otra de sus reivindicaciones al Ministerio de Agricultura, que no ha puesto un tope de precio a su producto cárnico, que llega a la cadena de alimentación y que han llegado a sacrificarse reses a «menos del 10 por ciento de su coste de producción».
Bañuelos asume en estas circunstancias la Unión de Criadores de toros de Lidia y ha prometido que junto al resto de la junta directiva experta en el sector espera «darle la vuelta a la situación y poner en valor al toro».
«La plaza es el más importante de los escenarios. El toro es la raza más pura y el espectáculo lleva celebrandose cientos de años», ha defendido.
Entre las medidas que impulsará entre sus 350 asociados será la reducción de la cabaña ganadera de lidia en un 35 por ciento, ya que en la actualidad el sector dobla la oferta respecto a la demanda real.
Para expresar las críticas del sector al Gobierno, hasta que el sector «lleve a los tribunales al Gobierno» en una demanda judicial coordinada, ha apuntado que «a título personal» este fin de semana representantes del sector taurino expresarán su repulsa a la gestión del Ejecutivo paseándose cerca de las plazas de toros de España ataviados con algún elemento característico de su indumentaria para ser identificados.
«Estos paseos taurinos se harán porque el sector está harto y pide respeto», asegura Bañuelos que ha acusado al Gobierno de pretender una «estocada» al sector que «no va a producirse».
No obstante, no cree que vayan a celebrarse este año las grandes ferias taurinas aunque confía en que finalmente alguna corrida sí pueda celebrarse.