Ignacio Aguado habló este pasado lunes con Juan Ramón Lucas en ‘La brújula’ de Onda Cero y se empeñó en distanciarse del PSOE, «no apoyaremos un mes más de estado de alarma porque la Constitución dice que tiene que durar 15 días», y en tirar de demagogia contra Podemos, «Pablo Iglesias es el responsable a nivel nacional de las residencias de mayores».
El vicepresidente madrileño, que 24 horas antes había puesto el Gobierno de Madrid al borde del KO, llegó a hacerse la víctima: «Somos conscientes de que estamos en boca de todos porque somos el Gobierno a batir y a todos los que quieran intentarlo sólo puedo decirles que van a quedarse con las ganas porque tenemos un gobierno más sólido que en el de España».
GUERRA SUCIA DE AGUADO Y DÍAZ AYUSO
El Gobierno de la Comunidad de Madrid estaba «en boca de todos» porque Aguado había cebado el rumor que decía que estaba dispuesto a liderar una moción de censura contra Díaz Ayuso que iba a contar con el respaldo de PSOE y Más Madrid.
En declaraciones a El Confidencial, el vicepresidente autonómico se empeñó en cada una de las respuestas en mostrarse crítico con la gestión del Partido Popular en general y de la baronesa madrileña en particular.
Sobre el siniestro apartamento ‘alquilado’ por Díaz Ayuso, señaló sin convencimiento: «Es un asunto personal de la presidenta y, de tener que dar explicaciones, tendrá que ser ella la que lo haga (…) Lo que nos ha trasladado es que es un asunto particular y que se paga de su bolsillo y no afecta al dinero del contribuyente. Yo con sus explicaciones me quedo tranquilo».
ODIO
Díaz Ayuso y Aguado no se tragan: la presidenta madrileña gobierna como si lo hiciera con mayoría absoluta, fichó como jefe de Gabinete a Miguel Ángel Rodríguez (que acusó al padre de Aguado de haber recibido una subvención de la Asamblea de Madrid de 102.000 euros «por la cara»), y a finales de marzo dejó a Cs sin la competencia de las residencias de mayores en plena pandemia.
Aguado tampoco se queda atrás: el vicepresidente ha utilizado una mayoría alternativa con el centro-izquierda para asegurarse un gran trato mediático en Telemadrid, cadena enfrentada con Díaz Ayuso y dirigida por su amigo José Pablo López.
GUERRA SUCIA
Desde una consejería de Ciudadanos se escupió un contrato falso con una empresa de Kike Sarasola, arrendador de Díaz Ayuso. Aguado lo explicó ante Fernando Garea en El Confidencial: «Lo que se ha hecho es abrir una investigación dentro de la Consejería de Asuntos Sociales para ver por qué se subió ese contrato y la conclusión a día de hoy es que simplemente fue un error humano».
Nosotros no vamos a hacer nada que nos perjudique como Gobierno. Nada que dañe a la presidenta y tampoco vamos a tolerar ningún tipo de falsas afirmaciones e insidias hacia Ciudadanos ni hacia ningún miembro del Consejo de Gobierno«, añadió.
Y remató el guiso: «Ya se ha hecho la investigación, la conclusión a la que se ha llegado es que es un error humano, que se corrigió en muy poquito tiempo y a partir de ahí se tomó la decisión por la persona que estaba al frente de este equipo de dimitir».
AGUADO CONTRA LA OPOSICIÓN DE DÍAZ AYUSO
Aguado también se desmarcó de las manifestaciones de los ‘cayetanos’ impulsadas por Vox y toleradas por el PP: «Entiendo que haya gente que esté enfadada, que esté preocupada, incluso indignada con la situación que se está viviendo, pero eso no puede llevarnos a saltarnos las normas, las leyes y la responsabilidad que hemos asumido en las últimas semanas y meses».
«No se puede echar al traste el compromiso de miles y miles de españoles, saliendo a la calle como hemos visto en los últimos días, por muy legítimas que puedan ser las protestas, que yo respeto, pero eso no se puede hacer saltándote las leyes y la distancia social y todas estas normas que nos hemos dado entre todos para poder vencer al virus», añade.
Sobre el papel de Díaz Ayuso respecto al Gobierno central, fue claro: «No creo que los Gobiernos tengamos que hacernos oposición unos a otros. Los gobiernos lo que tenemos que hacer es trabajar por el interés de los madrileños y el Gobierno de Pedro Sánchez por el interés general. Y ayuda poco que estemos enfrentados, hay que intentar siempre tender puentes, sumar y buscar».
«Nunca la beligerancia entre administraciones ayuda a un final feliz, a un buen entendimiento. Si finalmente no pasamos de fase a pesar de cumplir los criterios sanitarios que ha marcado el Ministerio, entiendo que se debe a motivos estrictamente políticos; y si entramos en el plano político tiene mucho que ver el talante de las personas que toman esas decisiones», explica.