El vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, ya puede dormir tranquilo. En un proceso electoral exageradamente acelerado y con una participación muy baja, se ha blindado en el poder lo que queda de legislatura. Tan solo han hecho falta 53.167 votos (de los 516.492 inscritos) para tomar la decisión de que Iglesias es el líder indiscutible de Unidas Podemos. Desde el partido se vende como que el 92,19% de los participantes a una Asamblea Ciudadana telemática quieren al vicepresidente como referente de la formación, pero la realidad es que gracias a la decisión de ese núcleo duro activista, Iglesias podrá desprenderse por fin de la limitación salarial a los tres salarios mínimos.
Con esta decisión, Iglesias tendrá una legislatura tranquila; Al menos, a nivel interno. A partir de ahora, los altos dirigentes de Unidas Podemos que ocupen un cargo público no tendrán que estar encorsetados a nivel salarial. Podrán cobrar el salario íntegro siempre que donen un porcentaje «en función de las responsabilidades asumidas”. Y aunque no está claro cómo se desarrollará, sí que podrán cobrar más de los 2.850 euros al mes (tres salarios mínimos interprofesionales) que se permitían hasta ahora.
La Asamblea Ciudadana ha sido rápida, nocturna y se ha despachado en segundos. Había una cara visible para rivalizar con Iglesias, pero apenas consiguió el 7% de los votos. Esa cara era la de Fernando Barredo, que tan solo ha obtenido poco más de 4500 votos. Un desastre, comparado con la arrolladora victoria de Iglesias gracias a su núcleo duro de activistas. “Gracias a todos los inscritos e inscritas que habéis participado en la 3a Asamblea de Podemos. Es un honor recibir vuestro apoyo. Enhorabuena a los nuevos miembros del Consejo Ciudadano y del Comité de Garantías. Vamos a dejarnos la piel para seguir demostrando que sí se puede”, ha afirmado Iglesias en Twitter.
Gracias a todos los inscritos e inscritas que habéis participado en la 3a Asamblea de @PODEMOS. Es un honor recibir vuestro apoyo. Enhorabuena a los nuevos miembros del Consejo Ciudadano y del Comité de Garantías. Vamos a dejarnos la piel para seguir demostrando que sí se puede.
— Pablo Iglesias 🔻 (@PabloIglesias) May 21, 2020
Solo el 11% de los inscritos participaron en esta Asamblea Ciudadana acelerada y fueron suficientes para blindar a Iglesias en el poder por lo que resta de legislatura, siempre que aguante la crisis. El pasado 2 de mayo, el censo de Podemos afirmaba que había registrados 516.492 afiliados. Y con que el 10% de ellos haya votado por Iglesias, ha sido suficiente para que el secretario general del partido diera las gracias Vía Twitter.
Ya muy lejos quedan esas palabras en las que decía Iglesias que la no participación la entendería como votos negativos (como declaró cuando sometió a votación si tras comprarse el lujoso chalet de Galapagar era apto para seguir al frente de la formación morada). El 10% es suficiente para tomar medidas y para dar giros de 180 grados en la política interna del partido y sustituir el límite salarial por un sistema algo más turbio.
La votación de la nueva Asamblea no solo blinda el poder de Iglesias, también lo hace con las 89 personas que venían presentes en su lista. Entre los que están el portavoz de la formación, Pablo Echenique, la ministra de Igualdad, Irene Montero, la secretaria de Estado de Montero, Ione Belarra o el director de Comunicación de Podemos y empresario Juanma del Olmo. Todos ellos con cargos públicos por la gracia de Iglesias.