El Ayuntamiento de Barcelona cambiará la gestión del verde de la ciudad con el objetivo de ganar espacios de biodiversidad y llegar a las 383 hectáreas en los próximos tres años, 130 más de las existentes actualmente, y favorecer la entrada espontánea de flora y fauna sin perder la calidad estética.
Lo ha explicado este viernes en una rueda de prensa telemática el concejal de Emergencia Climática y Transición Ecológica, Eloi Badia, en la que ha destacado que el verde ha tenido más presencia en los últimos meses coincidiendo con el confinamiento por el coronavirus: «A la que hemos dado un paso atrás, la naturaleza ha dado un paso hacia adelante».
Según Badia, la situación causada por la pandemia ha puesto en evidencia la necesidad de la ciudadanía de tener contacto con los espacios verdes para favorecer el bienestar físico y mental, por lo que el consistorio sigue apostando por la gestión ecológica y la naturalización de los espacios verdes para aumentar la naturaleza de la ciudad «y ganar más salud y calidad de vida».
Para conseguir el proceso de naturalización, el Ayuntamiento tiene previsto medidas como bajar la frecuencia de la siega para favorecer el crecimiento de las herbáceas o aumentar los alcorques con vegetación.
«Hasta ahora caracterizábamos el verde en función de los cuidados, el mantenimiento y la capacidad de gestión. Ahora proponemos hacer una evolución de este modelo para entender el verde respecto a los servicios y los usos que nos proporciona», ha señalado Badia.
Por eso han decidido cambiar las categorías de los espacios verdes basándose en criterios de protección, fomento del verde y conservación, de manera que los espacios según la gestión ecológica se centrarán en los espacios patrimoniales, los espacios de biodiversidad y los espacios verdes urbanos.
El concejal ha detallado que Barcelona ganará 17 espacios naturalizados en espacios verdes existentes, que representan 783.300 metros cuadrados, y 49.000 metros cuadrados más en espacios verdes viarios.
Además, se crearán refugios de biodiversidad en el Parc de la Ciutadella, en Diagonal Mar, en la plaza de la Sagrada Familia y en la plaza Gaudí, que se suman a los cinco ya existentes en la ciudad, en el Parc de Joan Miró, en los Jardins de Valent Petit, en la Fàbrica de Ca l’Alier, en la plaza de las Glòries y en los Jardins dels Doctor Pla i Armengol.