Sanidad decidirá la movilidad interregional en fase 3

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha explicado que las Comunidades Autónomas que entran este lunes en la fase 3 del plan de desescalada podrán plantear al Gobierno su salida del estado de alarma y la movilidad entre autonomías, pero ha añadido que será el Ministerio de Sanidad el que lo aceptará «en función de la realidad epidemiológica que tengan esos territorios».

En la rueda de prensa posterior a la Conferencia de Presidentes de este domingo, Sánchez ha explicado que la fase 3 en casi todas las autonomías coincide con el mantenimiento del estado de alarma hasta el próximo 21 de junio en el conjunto del país. Sin embargo, los gobiernos autonómicos que consideren que los datos sanitarios se lo permiten, podrán plantear salir de la fase 3, del estado de alarma y abrir la movilidad entre comunidades.

«Tienen la capacidad de pedir que se levante el estado de alarma y lógicamente nosotros aceptarlo en función de la realidad epidemiológica que tengan», ha explicado Sánchez, que ha insistido en que será en ese momento de nueva normalidad, según la denomina el Gobierno, cuando se podrá producir la movilidad entre comunidades.

Ha añadido a continuación que para tener un «paraguas jurídico» una vez que se levante el estado de alarma, el Gobierno aprobará el martes el real decreto ley con medidas sanitarias de aplicación en todo el territorio nacional.

Sánchez ha insistido en que las decisiones sobre la movilidad entre territorios, entre autonomías, sólo corresponden al Gobierno de España y que el único instrumento para limitarla es el estado de alarma. «Las comunidades pueden decidir pasar a la nueva normalidad y proponer al Gobierno el levantamiento del estado de alarma. Lo que no podemos hacer es renunciar a una prerrogativa tan importante como la libertad de movimiento y la restricción del mismo, que tiene que garantizarse por el Gobierno de España y no por un gobierno autonómico», ha insistido.

Una vez que concluya el actual estado de alarma, Sánchez ha confiado en no tener que volver a recurrir a él y que las medidas sanitarias que se mantengan permitan mantener controlada la enfermedad. «Esperemos no llegar a ese punto, para ello estamos en reforzar mecanismos de coordinación», ha dicho, y ha destacado que está «engrasada» la maquinaria de la coordinación entre consejerías y gobiernos para tomar decisiones.

COMPLEMENTARIOS SÍ, PERO NO CONTRADICTORIOS

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha defendido que los datos de exceso de mortalidad que han aportado el Instituto de Salud Carlos III (ISCIII) y el Instituto Nacional de Estadística (INE) son «datos complementarios» a los que aporta el Ministerio de Sanidad, y que, en ningún caso, son «contradictorios».

Así lo ha señalado este domingo en rueda de prensa tras la duodécima tercera reunión con los presidentes autonómicos para abordar las medidas en el marco de la pandemia de coronavirus.

Según ha indicado Sánchez, la publicación de estos datos justifica la «transparencia» del Gobierno durante la emergencia sanitaria. Además, afirma que las cifras que dio a conocer tanto el ISCIII como el INE son «datos parciales, no homogéneos», por lo que «es difícil poder compararlos unos con otros».

«Los excesos de mortalidad se estiman, no se miden, requieren de un proceso estadístico de modelización de mortalidad esperada, una predicción», ha explicado Sánchez, y ha insistido en que son «complementarios» a los datos que aporta Sanidad.

Según ha subrayado, las cifras que aporta Sanidad se contabilizan en base a los criterios de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y que son las comunidades las que trasladan esas cifras al Departamento que dirige Salvador Illa.

En cualquier caso, Sánchez reconoce que la cifra de excesos de mortalidad (que es mayor a las cifras oficiales de fallecidos por coronavirus) «sí permiten estimar el verdadero impacto en vidas», esto es, «la mortalidad directa y la adelantada», pues no son muertes «por la infección por el virus, pero sí por el impacto social y sanitario que ha tenido la pandemia, el aislamiento y el cambio de estructura social y sanitaria».

Y ha recalcado que el momento de saber «la envergadura en términos de letalidad» de COVID-19 en España será cuando se supere la pandemia y se tenga una «cierta perspectiva».

En este sentido, ha destacado que «ya» empiezan a verse algunos datos sobre la incidencia de la pandemia en España, como son los resultados del estudio de seroprevalencia, que indican que ha habido un 5% de contagiados en el país, y que el índice de letalidad es del 1%. «Todavía necesitamos tiempo para que todas las informaciones encajen», ha añadido, para defender que «no se puede criticar al Gobierno por no dar información», pues están siendo «trasparentes».