El Ministerio de Igualdad se reúne con la asociación Malas Madres

La ministra de Igualdad, Irene Montero, ha abordado este viernes los problemas de conciliación de la vida familiar y personal, y las necesidades de corresponsabilidad y cuidados ante la crisis sanitaria a raíz de la pandemia del coronavirus. La ministra ha insistido en este asunto se debe resolver «desde lo público y lo común» y no solo desde el ámbito privado y familiar, ya que «el conjunto de la sociedad debe implicarse en el trabajo de cuidados».

Montero se ha reunido telemáticamente con representantes de la Asociación Yo No Renuncio del Club de Malasmadres, que le han presentado la campaña ‘Esto no es conciliar’ lanzada en el Estado de Alarma y que lleva ya 191.000 firmas de apoyo. A través de esta iniciativa, reclaman al Gobierno que implante el teletrabajo por imperativo legal hasta que todo vuelva a la normalidad, que facilite la reducción de jornada sin pérdida salarial, así como una ayuda retributiva a la contratación de personal para cuidar a los menores.

Según ha informado Igualdad, durante la reunión se ha compartido la preocupación para que los efectos de la crisis post COVID-19 no supongan «una vuelta al hogar de las mujeres o un retroceso en las políticas de conciliación y corresponsabilidad». Por su parte, desde la asociación han denunciado en reiteradas ocasiones que hay miles de madres están recurriendo a la excedencia, sin sueldo, por cuidado de hijos e hijas al verse obligadas a volver a sus puestos de trabajo físicos.

TELETRABAJO Y CONCILIACIÓN

Montero ha informado a Malas Madres de los avances que se están haciendo junto al Ministerio de Trabajo para que la regulación del teletrabajo no suponga una ampliación de la brecha de género. A su juicio, ha insistido en «la importancia que se tenga muy presente, tras la crisis sanitaria, la realidad de las mujeres y la perspectiva de género».

Tanto Montero como las representantes de la asociación Malas Madres han coincidido en la importancia de combinar propuestas políticas que resuelvan los problemas más urgentes con el diseño de «cambios estructurales que permitan atender a las necesidades de corresponsabilidad y cuidados del conjunto de la sociedad».

La fundadora de Malas Madres, Laura Baena, ha destacado durante la reunión que «la crisis ha destapado la falta de estructura de conciliación» y que eso «está teniendo una fuerte penalización para las mujeres».

En el encuentro también se han abordado otras cuestiones relacionadas con la conciliación, como la puesta en valor de buenas prácticas en las empresas, el desarrollo de campañas de sensibilización para fomentar la corresponsabilidad o medidas en el ámbito laboral que eviten que las mujeres tengan que renunciar a sus carreras profesionales por la maternidad.