La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha advertido de que el continuo ascenso de las temperaturas a nivel mundial y en particular en el Ártico, donde esta primavera se han alcanzado anomalías térmicas de 8 grados centígrados por encima de los valores normales, puede provocar una aceleración del cambio climático al fundirse el hielo que cubre el permafrost.
La portavoz de la AEMET Beatriz Hervella, ha explicado que es «como la pescadilla que se muerde la cola» ya que esta primavera ha sido en su conjunto cálida en Europa aunque «no de récord».
Si bien, ha subrayado los datos alcanzados en Rusia, donde la temperatura media en el mes de mayo ha estado de media 5,3ºC por encima de lo normal y además, ese dato es casi 2ºC (1,9ºC) superior al anterior récord para un mes de mayo.
Aún más importante para la portavoz es el hecho de que en Siberia la anomalía térmica en el mes de mayo ha llegado a 8 grados centígrados y ha mostrado su preocupación por que en esa zona está el permafrost, que son suelos permanentemente congelados y que llevan acumulando gases de efecto invernadero, principalmente metano, en gran cantidad en su suelo.
CALENTAMIENTO GLOBAL Y CAMBIO CLIMÁTICO
«Si se funde ese hielo, al descongelarse el metano, un gas de efeco invernadero, se está contribuyendo al calentamiento global», ha advertido Hervella que ha alertado también de que esto provoca una «realimentación positiva», es decir, la temperatura sube, se funde más hielo del permafrost, lo que a su vez genera una mayor liberación de metano y así sucesivamente.
En ese sentido, ha añadido que los meses de abril y mayo de 2020 han sido los abril y mayo más cálidos desde que hay registros en el planeta, al tiempo que tres de los cinco mayos más cálidos se han registrado en el último lustro.
Asimismo, ha indicado que los últimos 12 meses han sido de forma consecutiva los más cálidos en todo la Tierra desde que hay registros. En cuanto a Europa, Hervella ha precisado que ha tenido un carácter «cálido» pero «no de récord», a diferencia con las seis primaveras anteriores.
Sin embargo, ha subrayado que esta estación ha sido la más soleada en Irlanda, Reino Unido, Países Bajos, Bélgica y Dinamarca, mientras que España ha sido el país «con más déficit de sol» en este trimestre, seguida por Portugal, aunque no ha sido récord.
Esto se debe, en parte a que la estación ha estado marcada por el persistente bloqueo del anticiclón escandinavo, que ha ejercido de «barrera» de las altas presiones y ha obligado a las borrascas a transitar por el sur de Europa, lo que explica el déficit de sol de la Península Ibérica, que ha tenido una primavera más lluviosa y tormentosa de lo normal.