El Juzgado de Instrucción 2 de Granada ha dado por concluida la instrucción de otra de las piezas separadas del ‘caso Nazarí’, la del expediente Obispo Hurtado, y ha procesado al exalcalde de Granada José Torres Hurtado (PP) y a la que fuera su concejal de Urbanismo, Isabel Nieto, junto a dos personas más, por delitos de asociación ilícita u organización criminal, prevaricación, tráfico de influencias, malversación de caudales públicos y contra la ordenación del territorio.
El resto de los procesados son el que fuera director de Obras Municipales, Manuel Lorente, y un funcionario del área de Urbanismo, según consta en el auto de procedimiento abreviado, en el que la jueza da traslado a las partes para que en el plazo de quince días soliciten la apertura del juicio oral, formulando escrito de acusación, o el sobreseimiento de la causa.
La jueza señala en el auto que el caso Nazarí investiga una presunta trama corrupta en el Ayuntamiento de Granada –durante el pasado mandato del PP– que, de «forma continuada y prolongada en el tiempo», habría estado beneficiando «tanto a diferentes promotores urbanísticos como directamente a los familiares y allegados de los principales investigados», en contra del interés general y «contraviniendo de forma continuada la normativa urbanística» con el consiguiente «perjuicio a las arcas municipales».
Esta supuesta trama gira en torno a varios expedientes urbanísticos que han sido objeto de piezas separadas. Dos de ellas están ya a un paso del juicio: el expediente Registrador, en la que fueron procesados el pasado diciembre Torres Hurtado e Isabel Nieto y esta última sobre el expediente Obispo Hurtado.
Esta pieza está relacionada con supuestas irregularidades en una promoción inmobiliaria donde el exalcalde de Granada y su concejal de Urbanismo, así como sus respectivos núcleos familiares, «tenían participación». La jueza ha acordado por su parte el sobreseimiento provisional de la causa para otros cuatro trabajadores, entre ellos el que fuera coordinador del área de Urbanismo.
Se trata por tanto de la segunda pieza separada de esta macrocausa en la que han sido procesado Torres Hurtado y la que fuera su concejal de Urbanismo, que a su vez han sido juzgados y están pendientes de sentencia en el llamado ‘caso Serrallo’, en el que se ha investigado la construcción supuestamente irregular de una discoteca en una zona donde en principio debía ir un área de recreo infantil.