La presidenta de Manos Unidas, Clara Pardo, ha avisado de que problemas mundiales como el hambre o la pobreza «no han desaparecido» sino que, por el contrario, han seguido «avanzando» durante la pandemia, pese a la «sensación generalizada de parálisis» que ha provocado el Covid-19, y por ello, ha hecho un llamamiento a la colaboración para poder mantener los proyectos que realizan en los países más empobrecidos.
«Es evidente que el hecho de que esta pandemia haya comenzado por los países de primer nivel, ha cambiado mucho el orden de las cosas. Al ser los países europeos y Estados Unidos los que han sufrido tanto, parece que el resto de los problemas mundiales han desaparecido, pero nada más lejos de la realidad, la pobreza, el hambre, las consecuencias del cambio climático, siguen avanzando», ha advertido Pardo en una entrevista concedida a Europa Press.
En concreto, ha indicado que, en los últimos meses, con los confinamientos obligados, la situación de los más empobrecidos del planeta, que generalmente están empleados en trabajos informales, «se ha agravado aún más al no poder salir a buscar un jornal o comida».
Además, la pandemia ha conllevado una «bajada generalizada de recaudación en las ONG», una disminución que, según explica Pardo, en Manos Unidas está provocada, sobre todo, por la imposibilidad de realizar actividades recaudatorias que contribuyen en gran parte a los ingresos de la organización como mercadillos, conciertos, cenas del hambre, etcétera, que han sido suspendidas debido a la emergencia sanitaria.
En todo caso, ha agradecido la «generosidad y solidaridad incomparable» de los españoles que «se han volcado con la ayuda a ONG locales» y «no han dejado de lado a los países del Sur». En Manos Unidas, según precisa, los socios no solo han permanecido fieles sino que en algunos casos, incluso han aumentado sus donaciones pese a la situación.
DISMINUCIÓN DE INGRESOS
Pardo reconoce que tanto la propia pandemia como la caída de ingresos va a afectar a los proyectos que apoyan, tanto a los que están en ejecución como a los que están en previsión de realizar. Por un lado, según indica, la existencia en muchos países de estados de alarma que obligan el confinamiento, afectará al número de solicitudes de ayuda que la ONG reciba, y por otro, una disminución de los ingresos «obligará a un estudio muy exhaustivo de todas las solicitudes recibidas».
Hasta la fecha, según destaca, la ONG de la Iglesia Manos Unidas es «una de las pocas organizaciones que dedica casi el 90% de sus ingresos a la financiación de proyectos» y ha asegurado que harán «todo» cuanto esté en su mano para poder mantener ese porcentaje. Si bien, señala que «al menos este año será muy difícil mantener este nivel dada la situación de crisis económica».
Por ello, ha hecho un llamamiento a los ciudadanos para que colaboren, ya sea con donativos o haciéndose voluntarios, de forma que la ONG pueda mantener todos los proyectos que apoya en más de 57 países de África, América Latina y Asia, «en lugares donde nadie llega». «Nuestros 61 años de historia son el mejor referente de seriedad, transparencia y austeridad que podemos tener», precisa.
«Con estos meses tan complicados que hemos atravesado en España, lo que se ha puesto de manifiesto es que la solidaridad entre todos es fundamental para salir adelante y creo que la sociedad española está, sin duda, muy sensibilizada en este aspecto», enfatiza.
HACINAMIENTO Y FALTA DE MEDIOS SANITARIOS
Además, recuerda que la pandemia ha venido a sumarse a otros problemas como los conflictos bélicos y el cambio climático, y apunta que los millones de personas desplazadas que hay en el mundo se encuentran en situaciones dramáticas de hacinamiento, falta de medios sanitarios, agua potable y alimentos y advierte de que la llegada del Covid-19 «puede traer consecuencias fatales» si no se les ayuda.
En mayo, ante la grave situación que azotaba el mundo, Manos Unidas lanzó una campaña de emergencia con el lema ‘Ayudar a los más vulnerables está en tus manos. Que tu solidaridad no se pare en nuestras fronteras’ con el fin de recaudar fondos para financiar todas las solicitudes de emergencia. Hasta ahora llevan más de 100 proyectos de emergencias destinados a paliar la falta de medicamentos y de alimentos.
Entre estos proyectos, destaca el que acaban de poner en marcha en Kenia, donde la ONG está apoyando de manera directa a 3.900 personas e indirectamente, a 14.500. Con esta iniciativa han comprado material sanitario, han instalado una serie de depósitos que llevarán agua a 10 escuelas, formarán a personal sanitario sobre las medidas de prevención del coronavirus y distribuirán paquetes de alimentos a las familias más necesitadas.