Melilla plantea abrir la frontera con Marruecos con «desescalada»

La delegada del Gobierno en Melilla, Sabrina Moh, ha admitido este miércoles que la reapertura de la frontera de Melilla con Marruecos, cerrada desde hace más de cuatro meses por la crisis del Covid-19, «se está analizando desde un punto de vista sanitario» y no desde otros ámbitos, como los económicos o políticos, según ha manifestado en una entrevista en Onda Cero recogida por Europa Press.

La máxima responsable del Gobierno de la Nación en la ciudad española del norte de África ha señalado que «tenemos que tener muy claro que cuando abrimos la frontera se tiene que hacer con unas garantías, porque si no el trabajo que se ha estado desarrollando durante todos estos meses caería».

Moh ha recalcado que las ciudades fronterizas como Melilla y Ceuta «cuentan con un sistema sanitario más sensible» que el resto de territorios del país, por lo que el Gobierno de España «tiene que velar porque la apertura de los pasos fronterizos sea de manera satisfactoria para la ciudadanía española».

DECISIÓN LENTA PERO SEGURA

«Una mala decisión o una decisión prematura podría desencadenar en una situación sanitaria no deseada por la ciudadanía melillenses», ha advertido, al tiempo que ha hecho hincapié en que la reapertura de la frontera se está haciendo desde el punto de vista sanitario.

«Se está trabajando en ver cómo podría ser esa apertura, y se contemplan varias opciones. Una de ellas sería implantar un periodo de desescalada en la frontera, garantizando que las personas que pasaran lo hicieran en las mejores condiciones posibles», ha adelantado.

En este sentido ha querido dejar claro que la decisión se está tomando de forma lenta porque «se está analizando la situación para no tomar ninguna decisión que pueda repercutir negativamente en Melilla».

COMERCIO FRONTERIZO

En cuanto al comercio fronterizo que se estaba dando en el paso de Barrio Chino y a las aglomeraciones de personas que se producían, la delegada ha recalcado que, por una cuestión sanitaria, «no se puede contemplar ahora mismo la entrada de 10.000 personas en un periodo muy corto de tiempo» y «que no respetan ninguna de las medias sanitarias».

Sabrina Moh ha declarado que «desde el punto de vista sanitario es descartable en la situación en la que nos encontramos», en referencia al comercio fronterizo que protagonizaban miles de personas que portaban mercancías al lado marroquí, los conocidos como «porteadores» que trasladaba productos desde Melilla para su reventa en Marruecos.

Ahondando en esta idea, la representante gubernamental ha insistido en que «se está planteando la apertura progresiva que garantice que la situación sanitaria de nuestra ciudad no se vea agravada por un tránsito importante de personas diario».