El primer teniente de alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, ha avisado este lunes respecto a las restricciones a bares y discotecas por los rebrotes de coronavirus: «Que nadie dude de que después de la fase de información vendrá la fase de sanción».
Lo ha dicho en rueda de prensa junto al teniente de alcalde de Seguridad, Albert Batlle, y el intendente mayor de la Guardia Urbana, Pedro Velázquez, al presentar la ampliación de la oficina de recepción de denuncias del cuerpo municipal en el distrito de Ciutat Vella.
Collboni se ha referido a la resolución de la Generalitat que prohíbe abrir discotecas y salas de baile, así como a la restricción de horario hasta medianoche para bares y chiringuitos, y ha resaltado que «su incumplimiento tiene consecuencias también de carácter administrativo, y por tanto son sancionables».
«Hemos incidido mucho en información, acompañamiento, pedagogía, pero es evidente que una vez esto sea conocido por el conjunto de la ciudadanía, tenemos que hacer cumplir las normas hasta sus últimas consecuencias», ha aseverado Collboni, después de que la ciudad no registró ninguna sanción durante la primera noche en que las nuevas restricciones estuvieron en vigor.
En el mismo sentido, Velázquez ha remarcado que «la Guardia Urbana se toma muy en serio el cumplimiento de las prescripciones a nivel sanitario», y ha explicado que todas las denuncias en esta materia han ido precedidas de un aviso y pedagogía.
Además, Batlle ha valorado que durante la última noche «la presencia de locales de ocio abiertos era muy residual», y ha asegurado que bares y restaurantes también han cumplido con la obligación de cerrar a medianoche.