La consejera vasca de Salud en funciones, Nekane Murga, ha descartado que se decreten confinamientos «a corto y medio plazo» en Euskadi y considera que hay mecanismos para frenar la transmisión del covid-19.
En una entrevista concedida a El Correo, Murga reconoce no obstante que el País Vasco cuenta con «más positivos que otros países y territorios, pero menos pacientes en UCI porque contamos con una mayor capacidad de identificación».
Tras señalar que se cuenta con mecanismos para frenar la transmisión del covid-19, «detectarlo de forma precoz y cortar brotes de gran importancia», advierte de que salir de unas semanas de confinamiento, gracias a las que se lograron cifras con menos de 5 y 10 casos al día, «crearon unas expectativas que no eran reales y esa sensación de menor peligro llevó a que se hayan celebrado eventos y reuniones que han favorecido la difusión del coronavirus».
Cuestionada por la posibilidad de decretar confinamientos si las cifras no mejoran, Murga sostiene que con las medidas adoptadas y con la red de seguimiento «somos capaces de contener la curva epidémica, y esta es la línea en la que queremos seguir avanzando».
«Descartamos confinamientos a corto y medio plazo. Confío en que todos vamos a seguir colaborando en reducir el número de contagios limitando las situaciones de riesgo. Tampoco se puede tener a la sociedad en su conjunto encerrada, encorsetada y viviendo con un excesivo temor. Hay que buscar un punto de equilibro entre nuestras vidas y una epidemia que ha venido para quedarse meses y que debemos controlar», añade.
En este sentido, cree que se está consiguiendo contener esta segunda ola de la pandemia. A su juicio, se trata de «una etapa diferente a lo que fue la primera gracias a las medidas que se están aplicando y la red de control de casos».
«El uso de mascarilla, aunque podemos poner un día a la orden que la hace obligatoria, está teniendo una utilización progresiva. En los grupos de amigos y en las terrazas se ven cada vez más personas que la llevan. Su efecto aumentará en los próximos días», confía.
Respecto a cuándo se verá un descenso de los casos positivos, afirma que en esta segunda ola esperan alcanzar «un punto de estabilización y lucharemos para su descenso, pero sabemos que reducir los casos es algo muy complejo».
«El mantenernos es ya un logro, porque una epidemia se caracteriza por un aumento progresivo de los casos. Vamos a trabajar en contener el número de nuevos infectados y, una vez consigamos esta estabilidad, reducir los focos. Es como si en un barco hubiese vías de agua. Primero hay que taparlas para después achicar», ejemplifica.
CAMAS UCI
Asimismo, reconoce que se quiere tener «más oferta de camas UCI, al menos un 10% más hasta un máximo de 650-680», aunque en este momento la presión de la atención por el patógeno para los hospitales es «baja y tenemos capacidad de darle respuesta».
«Pero si siguen aumentado los casos las demandas asistenciales se incrementarán en las próximas semanas, aún durante el periodo vacacional. Es un reto añadido. Estamos ya creando unidades específicas Covid y reservando plantas en hospitales. Si el crecimiento se produjera, con estas medidas y el trabajo en red podremos dar una respuesta asistencial con las personas con las que contamos», expresa.
Por último, y cuestionada por cuándo puede llegar la vacuna a Euskadi, indica que las previsiones son que pudiera estar «para finales de este año o principios del que viene». «Hay que valorar su efecto real sobre la población, quiénes se van a beneficiar más de ella y durante cuánto tiempo», detalla, para añadir que, a día de hoy, «las medidas de prevención son las que logran reducir la transmisión del virus. Y se consigue con menos contacto entre las personas y más higiene».
