La Junta de Castilla y León ha notificado este lunes un nuevo brote en Burgos, que eleva a nueve los focos activos en la provincia, con un total de 65 personas contagiadas.
Este nuevo brote, con tres positivos originados en el ámbito laboral, se ha registrado en la capital burgalesa, y se suma a los siete que ya se habían declarado con anterioridad.
El resto de focos, uno en Miranda de Ebro y otro en Aranda de Duero, se mantienen estabilizados, aunque aumenta el brote de la capital ribereña, originado también dentro del ámbito laboral, y que ha pasado en la últimas horas de 10 a 11 positivos.
De esta forma, la Delegación Territorial de la Junta de Castilla y León, a través de su Servicio de Epidemiología en Burgos, continúa la vigilancia de estos brotes activos por la COVID-19 declarados en provincia.
La Dirección General de Salud Pública, a través del Servicio Territorial de Sanidad en Burgos ha iniciado la vigilancia y el control epidemiológico de los brotes en la capital burgalesa, a través del seguimiento de casos y de las correspondientes encuestas de contactos e investigación de las relaciones sociales de estas personas, tanto en sus entornos familiares como sociales y laborales.
La Junta recuerda que el medio de protección más eficaz y sencillo del que se dispone en estos momentos es el uso de la mascarilla obligatorio con carácter general en la Comunidad.