Los comerciantes y vendedores ambulantes del Rastro se han concentrado por sexto domingo consecutivo y han insistido en crear una mesa de trabajo con el Ayuntamiento para discutir la reapertura del mercadillo.
La asociación ‘El Rastro punto es’ ha convocado esta manifestación en la plaza de Cascorro, en la que un domingo más han reiterado su propuesta de mantener el mercado como hasta antes de la pandemia pero con el 50 por ciento de los puestos de forma alterna cada fin de semana, y han reclamado la creación de una mesa de trabajo con responsables del Ayuntamiento.
Así, el presidente de la organización, Lucio Gonzalo, ha declarado que han enviado una nueva carta al Consistorio y están esperando que este responda.
«Básicamente es la misma propuesta, queremos comenzar a trabajar ya porque lo necesitamos. Queremos seguir en nuestros puestos habituales», ha señalado Gonzalo, quien además ha insistido en que el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, «miente» cuando dice que los comerciantes exigen el cien por cien de los puestos.
«Siempre hemos mantenido la propuesta del 50 por cien de los puestos un domingo, y la otra mitad al domingo siguiente», ha defendido el presidente de la asociación.
Además, ha manifestado que, si el Ayuntamiento quisiera, el Rastro podría volver el próximo fin de semana, pero que mientras no haya respuesta por parte del Consistorio, seguirán «insistiendo» y protestando en la calle.
Por otro lado, ha destacado que hay integrantes de la asociación que están «desesperados por la situación económica» y que «están viviendo de los servicios sociales», pero ha afirmado que siguen «unidos» y con el objetivo de volver a trabajar cuanto antes «pero no a cualquier precio».
«Aceptar lo que nos propone el Ayuntamiento sería eliminar el Rastro histórico, sería eliminarnos a nosotros como vendedores y es algo inaceptable para el colectivo», ha defendido Gonzalo, que también ha reiterado su incomprensión por la propuesta del Gobierno de Madrid de trasladar parte de los puestos a la Gran Vía de San Francisco.
Por último, ha mandado un mensaje a Almeida y le ha pedido que les escuche y considere su propuesta, que es «justa, necesaria, equitativa y generosa» y ha planteado de nuevo su incertidumbre sobre los «intereses ocultos» que puede tener el Ayuntamiento para no reabrir el mercado.