Parece que el lawfare ha pasado a mejor vida. Han sido unos meses intensos en los que el vicepresidente del Gobierno y líder de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, ha motivado a los suyos a que deslizaran la idea de que la Justicia estaba corrupta y que utilizaba sus mazos para apartarles del poder. Ahora la papeleta es bien distinta después de que la Audiencia Nacional haya decidido que Iglesias recupere su condición de perjudicado en el caso Dina, en contra de lo que consideran tanto la Fiscalía Anticorrupción como el magistrado Manuel García Castellón. Iglesias se ha convertido en un fan de la Justicia y no ha perdido la coyuntura para mandarle guiños a los jueces.
Ha sido una cuestión técnica y la Audiencia Nacional considera que el hecho de retirarle la condición de perjudicado a Iglesias en el caso Dina se basa en hipótesis y no en hechos probados. Cuestiones técnicas que Iglesias aplaude, y mucho, razón por la que los mensajes del vicepresidente tras conocerse este hecho han sido bastante más amables a lo que Iglesias tiene acostumbrado a los magistrados. Esta vez el Consejo General del Poder Judicial no tendrá que mandar otro escrito solicitando mesura al vicepresidente porque Iglesias está contento con lo que ha decidido la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional.
La decisión ha sido por unanimidad de esta Sala, algo que dará fuerza a Iglesias para seguir en la línea de siempre; la misma que apuntaba su exabogado José Manuel Calvente: utilizar esa condición para hacer (más) campaña.
«A VOX le gustaría que la Justicia fuera como en la dictadura, y que se persiguiera a demócratas y que se ilegalizaran partidos políticos, porque saben que es la única forma que tendrían de lograr lo que la España democrática y plural nunca les dará en las urnas», ha comentado Iglesias. Ahora resulta que la Justicia, según el renovado criterio de Iglesias, no es como en una dictadura, algo que con el concepto lawfare no dejaron de deslizar los suyos desde el mismo momento en que se le retiró la condición de perjudicado en el caso Dina.
Podemos ha entrado y salido de la idea de que la Justicia está politizada varias veces. Por un lado, vende que este poder no debería estar ideologizado mientras presiona para poder colocar vocales en el Consejo General del Poder Judicial; y por otro, ha cuestionado la justicia en función de que le gustaran o no los fallos judiciales. Si la candidata de Podemos a la Comunidad de Madrid, Isabel Serra, resultaba condenada, la Justicia era una vergüenza, pero si la Audiencia Nacional decide retirarle la imputación se trata de justicia en el sentido más puro del concepto.
«El PP ha venido a la #SesionDeControl a criminalizar a familias pobres para desplazar el foco de los verdaderos problemas de acceso a la vivienda. He respondido leyendo lo que dicen algunos jueces sobre la «okupación» y lo que dice la Constitución sobre el derecho a la vivienda», ha comentado. También los jueces son ahora un referente en este tipo de casos, que no para opinar sobre asuntos que conciernen a la formación morada, como para investigar si hay que imputar a Iglesias o no por haber escondido una tarjeta durante meses para devolverla tiempo después con el contenido irrecuperable y dañado.
Tampoco el azote de Podemos, su portavoz Pablo Echenique, ha podido contenerse ante la gran noticia. «¿Todos los que han atacado durante horas al Vicepresidente Segundo con esto en tertulias y editoriales dedicarán ahora la misma cantidad de horas a reconocer el error y a pedir perdón o normalizamos el «difama que algo queda» como práctica mediática?», se ha preguntado en un mensaje. No hay que olvidar que Echenique fue quien más esgrimió el concepto lawfare cuando no les venía bien dadas.
No debemos olvidar que el caso no está cerrado y que Manuel García Castellón sigue investigando y tras la pista de esa pieza separada que investiga el presunto robo de un teléfono a la exasesora del vicepresidente Dina Bousselham. De nuevo, si la Justicia da un paso en falso, es probable que reviva la idea de que está corrupta, según han comentado en reiteradas ocasiones algunos miembros de Unidas Podemos.