La entrada de Podemos en la ONU causa revuelo en su seno

Uno de los últimos grandes triunfos del partido de Pablo Iglesias ha sido la entrada en la ONU como relator de un compañero, Pedro Arrojo. Íntimo de Pablo Echenique, Arrojo ha sido diputado de Unidas Podemos, además de profesor y activista. El propio Iglesias le convenció para presentarse en sus listas por Zaragoza en las últimas elecciones.

Tiempo después, Arrojo consigue ser nombrado relator de la ONU. Concretamente, relator del Derecho Humano al Agua y el Saneamiento. Durante 3 años, Arrojo abandonará el Congreso para desempeñar la función de elaborar informes encaminados a potencial el derecho humano al agua.

Sin embargo, han llegado determinadas críticas por parte de miembros de la ONU. Según detallan fuentes de Moncloa.com, el secretario general de las Naciones Unidas, el portugués António Guterres, ha recibido múltiples reacciones al nombramiento de Arrojo como relator.

Varios líderes internacionales han expresado dudas ante el perfil activista, anarquista y comunista del diputado, preocupados por su posible incapacidad para potenciar una cultura del agua integradora y de amplio espectro. Creen que su tiempo en Podemos podría condicionar el debate del agua en el mismo seno de Naciones Unidas.

Han sido varios los apoyos que le han facilitado pegar el petardazo a este profesor universitario. Buenas relaciones con el presidente de México Manuel López Obrador, con el Movimiento de Salvación Patriótica del Chad y el mismo Gobierno chino han propulsado a este profesor de Ciencias Físicas hasta las alfombras rojas de la política internacional.

ARROJO HACE A PODEMOS INTERNACIONAL

El acceso a este cargo por parte Arrojo no ha sido fácil, pues no ha contado con el apoyo abierto de todo el mundo. Iglesias sí que ha ejercido todo el poder que estaba en su mano para facilitar el acceso de su candidato a la ONU, sin embargo, otros referentes españoles se han abstenido. Es el caso del embajador español, dependiente directo de la ministra de Exteriores Arantxa González Laya, que por conflicto de intereses ha preferido abstenerse de la votación.

Aún con el embajador fuera de la votación, Arrojo se ha impuesto y estará durante al menos tres años en el cargo para elaborar informes no vinculantes, recomendaciones y otro tipo de textos sobre el desarrollo del derecho humano al agua, punto clave donde Arrojo tiene una holgada experiencia que le capacita para el cargo.

SUSTITUYE A LÈO HELLER

Arrojo ocupará el espacio que deja Léo Heller, un profesor de la Universidad de Minas Gerais (situada en Brasil) que en noviembre acaba su mandato. Durante sus tres años de ocupación Heller ha visitado Lessoto, Tayikistán o Botswana, tal y como revela El Plural.

Arrojo no será el único que estrena un cargo en las Naciones Unidas. Junto a él, la ONU elegirá también a otros importantes cargos como el de Relator Especial sobre la situación de los Derechos Humanos en Eritrea o el grupo de trabajo sobre desapariciones involuntarias en países africanos. Temas olvidados que la ONU se esfuerza por mantener en primera línea.