El vigésimo octavo Festival Otoño Musical Soriano, que clausuró su edición más especial e íntima el pasado sábado 26 de septiembre, ha llenado todos sus espectáculos reconciliando al público y a los artistas con la cultura, tras el parón por la pandemia del coronavirus.
El concejal de Cultura, Jesús Bárez, y el director del Festival, José Manuel Aceña, han dado más detalles de esta edición que ha respetado todas las medidas sanitarias de la Junta de Castilla y León para la celebración de espectáculos.
José Manuel Aceña ha señalado que se han vendido todas las entradas permitidas, con un aforo que ha rondado el 20% del habitual, con cerca de 120 espectadores por actuación en el Palacio de la Audiencia y unos 500 en el polideportivo San Andrés en el concierto de Diego ‘El Cigala’.
«Otros años esa cifra la hemos multiplicado por cuatro o cinco, pero cuando en agosto presentamos la programación había mucha incertidumbre y cada semana íbamos cambiando el planteamiento», ha señalado su director, que ha detallado que han sido 2.263 los asistentes en total.
En este sentido, ha indicado que han sido «todavía más rigurosos» de las exigencias marcadas desde la Junta por lo que había una fila libre y tres asientos entre cada espectador o grupo conviviente.
«ARTISTAS EMOCIONADOS AL VOLVER A LAS TABLAS»
José Manuel Aceña ha indicado que tanto público como artistas se han mostrado «muy agradecidos» por el desarrollo de este Festival y ha apuntado que ha habido gente «que se ha emocionado al volver a las tablas de un escenario» ya que «alrededor de la cultura vive mucha gente.
El director del Otoño Musical ha recalcado que, a pesar de las limitaciones de aforo, el Festival «no desmerece la calidad de otras ediciones» con 15 variadas programaciones.
«Otros años estaríamos haciendo balance de cifras, de miles de asistentes, pero este año la noticia es que se ha podido celebrar el festival con calidad y seguridad y que el público ha comprobado que se han hecho bien las cosas y ha respondido», ha remarcado Aceña.