El ya expresidente de la Generalitat Quim Torra comparecerá este miércoles en el Parlament en un pleno monográfico sobre su inhabilitación, como solicitaron JxCat y ERC, aunque la convocatoria de la sesión queda condicionada a que el cese del expresidente se publique antes en el Boletín Oficial del Estado (BOE).
Fuentes parlamentarias han explicado que la Junta de Portavoces ha acordado fijar este pleno para el miércoles, pero podría cambiar de fecha si el BOE no publica el cese de Torra.
La Junta de Portavoces ha acordado esta fecha en la reunión de este martes, después de que la Mesa del Parlament admitiera a trámite la petición de celebrar el pleno con el voto favorable de JxCat y ERC, y en contra de Cs y el PSC-Units, que consideran que Torra no debería poder comparecer.
En la solicitud del pleno, se invitaba a Torra a comparecer por su «significación institucional», ya que el reglamento de la Cámara contempla que se invite a personalidades a invitar en el pleno independientemente de que no tengan un cargo concreto, pero Cs y el PSC han defendido que esto se utiliza para que comparezcan entidades pero no un expresidente.
En principio, el pleno se celebrará este miércoles por la tarde, pero todavía tiene que cerrarse el horario y el orden del día, y el presidente de la Cámara, Roger Torrent, no lo convocará oficialmente hasta que el cese de Torra no se haya publicado en el BOE.
Una de las incógnitas que puede haber en este pleno, y en toda la actividad parlamentaria hasta que se disuelva la Cámara, es si los grupos pueden presentar propuestas de impulso de la acción del Govern, es decir, iniciativas que pidan medidas o acciones concretas al Ejecutivo, ya que tras la inhabilitación de Torra está en funciones y su actividad es limitada, o si se deben ceñir a plantear propuestas declarativas.
También está por ver qué grupos participarán en el pleno, ya que el primer secretario del PSC, Miquel Iceta, ya ha anunciado este mismo martes que los socialistas no asistirán porque cree que supone una «manipulación e instrumentalización de la institución», y será una escenificación del independentismo, según él.
INFORME DE LOS LETRADOS
En la reunión de la Mesa se ha abordado el informe de los letrados del Parlament emitido el lunes sobre los pasos a seguir tras la inhabilitación de Torra, y que establece que tras la publicación del cese de Torra en el Diari Oficial de la Generalitat (Dogc) se inicia el plazo de 10 días hábiles para que Torrent haga las consultas con los grupos para ver si hay algún candidato con opciones de ser investido.
El informe concluye que, si Torrent considera que no hay ningún candidato con «posibilidades reales» para conseguir los apoyos para ser investidos, debe hacer un acto equivalente a una investidura fallida para activar el reloj de las elecciones.
Este acto podría llevarse a cabo a través de una publicación en el Boletín Oficial del Parlament (Bopc) en el que constate «la falta de un candidato viable» y no sería necesario convocar un pleno, y a partir de entonces empezaría a correr el plazo de dos meses antes de la disolución automática del Parlament y la convocatoria automática de elecciones.
Sin embargo, las fuentes ya citadas han explicado que en la Mesa los grupos han discrepado sobre este informe: Cs y el PSC no están de acuerdo y consideran que Torrent está obligado a convocar un pleno de investidura si algún grupo quiere presentar a un candidato a la Presidencia, aunque no tenga posibilidades reales de conseguir los votos, mientras que JxCat y ERC defienden el informe.
Esta situación podría producirse en el caso de que algún líder de la oposición se propusiera como candidato, algo que de momento solo Cs ha manifestado que no descarta hacer para facilitar que se active el reloj hasta las elecciones.
En lo que sí que están de acuerdo todos los grupos es en que debe ser Torrent quien tome las decisiones a medida que se vayan sucediendo los hechos y que el primer paso será hacer la ronda de consultas con los grupos para ver si hay algún candidato para una investidura.
