El expresidente de la Generalitat Quim Torra ha pedido a los partidos independentistas que acuerden «qué hacer si superan el 50%» de los votos en las elecciones catalanas, y ha asegurado que él se dedicará a intentar conseguir este acuerdo.
«A lo que animo y a lo que me dedicaré es a encontrar un común denominador para decir a la ciudadanía qué haremos con ese 50%», ha sostenido el expresidente este martes en una entrevista en Cataluña Ràdio.
Ha defendido que dentro de este acuerdo no están los comuns, sino los tres partidos independentistas; ha pedido que el independentismo recupere la línea de acción, y ha descartado darse de alta en JxCat: «Mi carácter de independiente permite más maniobras, ponerme en contacto con diferentes partidos».
Torra ha asegurado que si no llegan al 50%, «el unionismo correrá a pedir responsabilidades políticas» al independentismo, pero ha añadido que si superan ese 50%, debe haber consecuencias políticas, en sus palabras.
Ha lamentado que los partidos independentistas no han sido capaces de hacer efectivo el mandato del 1-O y ha pedido revalidar ese mandato en las próximas elecciones: «Lo entenderemos revalidado si superamos ese 50%«, ha concretado.
«Nosotros no pudimos hacer un referéndum con garantías. Ahora podemos revalidar el mandato, y eso debe tener consecuencias que son las de implantar la republica», y ha insistido en que los partidos independentistas deben hablar claro y comprometerse a llegar a un acuerdo común para decir qué harán si superan el 50% de votos.
Ha avisado de que si las formaciones independentistas pierden esta oportunidad «hay riesgo de que parte del independentismo pierda apoyos», y ha defendido que este acuerdo daría legitimidad interna y externamente.
«Cuando acepté ser presidente estaba dispuesto a hacer sacrificios. Yo pensaba que iría a la cárcel», ha apuntado Torra, que ha asegurado que para conseguir la independencia sabía que la única manera era la ruptura democrática y un proceso de desobediencia, por eso contaba con ir a la cárcel, en sus palabras.
Sobre las medidas sanitarias tomadas en Madrid por el Gobierno, Torra ha afirmado que son lógicas porque la situación lo requiere, pero que llegan tarde, y ha criticado que no se haga una discusión en base a datos, «sino un partida habitual de ajedrez político.
Torra ha asegurado que ha conocido más al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, durante la gestión de la pandemia, y ha sostenido que vio «un hombre que no priorizaba la vida y la salud de la gente», aunque ha reconocido que para él era más fácil tomar medidas porque no tenía al Ibex35 en la oreja, en sus palabras.
«Es un resistente de la política, tanto le da pactar con unos o con otros, porque lo que le importa es seguir gobernando», ha añadido el expresidente de la Generalitat, que también ha criticado que Sánchez aparezca y desaparezca de la política catalana cuando le interesa, según Torra.
«Apareció con la mesa de diálogo, cuando le convino rompió la mesa, después volvió a proponer la mesa, ahora parece que no les interesa», ha reprochado Torra, que ha defendido que el Govern solo puede ir a negociar si hay un orden del día.
Ha reclamado una ley de amnistía, porque considera que el Gobierno tiene «toda la mayoría del mundo para sacarla adelante», y se ha preguntado de qué sirven los indultos, tras lo que ha negado que sean para poner el contador del conflicto político a cero.
Preguntado por si debe ser el vicepresidente en funciones de presidente del Govern, Pere Aragonès, quien debe retomar la mesa de diálogo, Torra ha respondido que lo debe hacer «quien sea», y que el Estado solo negociará cuando vea un riesgo de perder, ha dicho textualmente.
Torra ha afirmado que se ha sentido «decepcionado» por los partidos, porque considera que son máquinas que hacen difícil los debates, y ha lamentado que en la política catalana haya un doble lenguaje, en el que, según él, por encima de la mesa hay un discurso y por debajo otro.
Sobre la remodelación del Govern, Torra ha subrayado que ningún cambio lo hizo «mirando el carné de nadie, sino buscando expertos», en referencia al relevo de la consellera de Empresa y Conocimiento Àngels Chacón –única miembro del PDeCat en el Govern– por Ramón Tremosa, que ha dicho que es un experto sobre el funcionamiento de las instituciones europeas.
Torra no ha hablado con el exconseller de Interior Miquel Buch desde su destitución, y ha asegurado que los Mossos d’Esquadra son unos excelentes profesionales, pero «si alguna vez pasa algo, se deben tomar decisiones», al ser preguntado por las actuaciones del cuerpo en las protestas tras la sentencia del 1-O.
Ha afirmado que no se planteó tirar la toalla en ningún momento de la legislatura, pero sí que puso «algunas condiciones para no tirarla», entre las que ha mencionado no votar el presupuesto de Pedro Sánchez y ni su investidura.