El ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, ha señalado este lunes que la difícil situación propiciada por la pandemia de coronavirus en la Administración de Justicia ha propiciado que determinadas medidas que proyectaba para el futuro del sector se hayan adelantado en el tiempo.
«El modelo de la Justicia del futuro que habíamos proyectado en nuestras mentes, se ha adelantado en el tiempo», ha señalado el ministro durante una conferencia pronunciada en la Universidad Pablo de Olavide de Sevilla titulada ‘Justicia 2030: más allá de la Justicia’.
Durante su intervención, Campo ha señalado además que el programa «Justicia 2030 es el plan más ambicioso jamás pensado para la administración de Justicia desde la transición española». Y ha incidido en que el problema actual que tiene la Justicia en España no se deriva de una falta de recursos económicos ni de recursos personales, sino más bien de un ensimismamiento y una falta de una mirada más atenta a la sociedad.
Así, ha subrayado que la Justicia debe sincronizarse «con una realidad que es cambiante», y ha explicado al hilo que en breve se aprobará en Consejo de Ministros la Ley de medidas de justicia digital y sostenible.
«Constituye nuestra apuesta de agilización procesal del servicio público: un gran impulso a la implantación de soluciones más ágiles y eficientes en la tramitación de los pleitos en los cuatro órdenes jurisdiccionales».
En este sentido, ha remarcado que el proyecto es dinámico que «nace para ser mejorado en base al diálogo, la cooperación y la cogobernanza con los actores de la justicia, la sociedad civil y con las administraciones responsables, para tomar decisiones de una manera más consensuada y eficaz».
Y ha apuntado que estos cambios van acompañados de un programa económico específico porque han alineado el plan Justicia 2030 «con los fondos del plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia que presentó el Presidente del Gobierno el pasado día 7 de octubre.
Entre los proyectos tecnológicos incluidos, Campo ha destacado las oficinas municipales de Justicia –los Juzgados de Paz del siglo XXI–, el proyecto de transformación digital del modelo de Registro Civil o la Inteligencia artificial aplicada a la Justicia y orientada al dato.
PROYECTOS NORMATIVOS DEL MINISTERIO
Sobre los principales proyectos normativos a desarrollar por su departamento, Campo ha señalado varios, como la reforma del Código Penal en materia de delitos contra la libertad e indemnidad sexual; los delitos de maltrato y abandono animal; o la adaptación de los delitos de rebelión y sedición para actualizarlos al siglo XXI.
Asimismo, el ministro ha destacado la reforma de la Ley de Enjuiciamiento Criminal (LECrim), que supondrá «la superación de la figura del juez instructor», al transferir la instrucción a manos del fiscal.
Campo ha concluido su intervención señalando que dado que «la nueva normalidad ha venido para quedarse un tiempo», desde su ministerio harán todo lo que esté en sus manos «para seguir garantizando una tutela judicial efectiva y los principios y valores de nuestro ordenamiento jurídico en un contexto de incertidumbre».