El vicepresidente segundo y ministro de Derechos Sociales y Agenda 2030, Pablo Iglesias, también intervendrá en el debate de la moción de censura que impulsa Vox contra el Ejecutivo.
Con ello, se suma al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que también subirá a la tribuna para defender la labor del Gobierno ante la moción de censura de Vox, tal y como ha avanzado el ministro de Transportes y secretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos.
Ambos dirigentes utilizarán así la prerrogativa que les confiere el reglamento del debate, en el que cualquier miembro del gabinete Ejecutivo podrá replicar a Vox si lo ve oportuno. En cualquier caso, Iglesias no responderá al líder de este partido, Santiago Abascal.
La participación de Iglesias en el debate no estaba del todo clara hasta ahora. Unidas Podemos ha decidido de cara al debate de la moción de censura que solo intervendrán mujeres para fijar la posición contraria a la iniciativa, informaron fuentes del grupo parlamentario.
De momento, en la formación no revelan las representantes de Unidas Podemos (cuentan con 18 diputadas) que rebatirán el jueves durante la sesión los argumentos de Vox para impulsar la moción, que con toda probabilidad será rechazada al no contar con apoyos necesarios.
Lo que está claro es que el portavoz de Unidas Podemos, Pablo Echenique, no intervendrá en la moción de censura y se abre la puerta a que suba a la tribuna la portavoz adjunta Sofía Fernández Castañón.
También se abría la posibilidad con ello a que las ministras de Unidas Podemos, Irene Montero o Yolanda Díaz, puedan intervenir durante el debate, que junto a parlamentarias de En Comú Podem podrían repartirse el turno en la tribuna entre las tres partes del grupo confederal.
IGLESIAS ALERTABA DE LA «AMENAZA» DE LA ULTADERECHA
Precisamente este lunes Iglesias ha mantenido esta mañana una reunión con los embajadores de los países de la UE en España, en la que ha asegurado que la ultraderecha supone «una amenaza para Europa» y ha traslado su preocupación por los pactos que el PP y Cs están llevando a cabo con el partido «ultraderechista Vox», plasmados en varias regiones e instituciones.
«Vox no preocupa tanto como que el PP, principal partido de la oposición, se embarque en una deriva con la ultraderecha como socios», ha remachado el vicepresidente segundo a los embajadores comunitarios.
ASÍ SERÁ EL DEBATE
El presidente de Vox, Santiago Abascal, presentará ante el Pleno del Congreso la quinta moción de censura que se debate desde la recuperación de la democracia en 1978, una iniciativa con la que busca sustituir a Pedro Sánchez en la Presidencia del Gobierno, pero que nace abocada al fracaso.
De hecho, es la que menos apoyos suscita de todas las que se han debatido hasta ahora. A priori el partido sólo cuenta con el respaldo de sus 52 diputados, menos incluso que los que cosechó Pablo Iglesias en 2017 y muy lejos de los 176 que necesitaría para prosperar.
El debate comenzará el miércoles a las nueve de la mañana y se desarrollará de acuerdo con lo establecido en el artículo 113 de la Constitución, y el 177 del Reglamento del Congreso. Así, el primero en subir a la tribuna será el diputado por Barcelona y candidato del partido a las futuras elecciones en Cataluña, Ignacio Garriga, quien se encargará de defender la moción, sin límite de tiempo.
Ejercerá así el mismo papel que desempeñaron el secretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos, en 2018 en la moción de Pedro Sánchez contra Mariano Rajoy, y la ‘número dos’ de Podemos, Irene Montero, con Pablo Iglesias en 2017 también contra el entonces líder del PP.
A lo largo de todo el debate, el Gobierno puede intervenir cuando le plazca. Es decir, algún miembro del Gabinete podrá replicar a Garriga si lo ve oportuno.
En las dos últimas mociones de censura fue el propio presidente, entonces Rajoy, quien replicó al candidato. Ahora Sánchez deberá decir si sigue el mismo modelo o delega en alguno de sus vicepresidentes o de sus ministros.