La consejera de Sanidad, Verónica Casado, ha advertido de que la situación en Castilla y León es «grave» y la Comunidad se encuentra en situación de «riesgo extremo» con 700,59 casos de COVID por cada 100.000 habitantes.
Casado se ha expresado así en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, en la que repasado la situación de la Comunidad, donde en la última semana se han contabilizado 10.357 casos de COVID.
Así, se sitúa como quinta comunidad con mayor incidencia, cuya media en España se sitúa en 452,73 casos, con una tendencia creciente en todas las provincias, salvo en Segovia, donde se registra un «leve aumento».
Casado ha explicado que da igual dónde se sitúa la Comunidad porque los datos son «muy preocupantes», no sólo en Castilla y León, sino en toda España y la Unión Europea.
El índice de reproducción en la Comunidad se sitúa en 1,13 y todas las provincias se sitúan por encima del 1, salvo Palencia y Segovia, que están en 0,97.
En cuanto a las capitales de provincia, la incidencia acumulada se sitúa en Ávila en 677 casos por cada 100.000 habitantes, en Burgos en 1086, en León en 944, en Palencia alcanza los 900, en Segovia 508, en Soria 332, en Salamanca 1.093, en Valladolid 680 y en Zamora se contabilizan 755. En cuanto a los municipios de más de 20.000 habitantes, Aranda (Burgos) se sitúa en 992, Arroyo (Valladolid) en 460, Laguna de Duero (Valladolid) en 790, Medina del Campo (Valladolid) en 341, Miranda (Burgos) en 700, Ponferrada (León) en 755 y San Andrés del Rabanedo (León) en 970.
Ante estos datos, la consejera de Sanidad ha señalado que preocupa el conjunto de la Comunidad y no zonas concretas y ha apuntado que la mitad de casos se detectan en zonas rurales, por lo que existe transmisión comunitaria «generalizada», de forma que ha pedido «limitar al máximo» los contactos, independientemente de donde se viva.
NIVELES DE ALERTA
El vicepresidente de la Junta de Castilla y León, Francisco Igea, ha anunciado que el próximo martes se aprobará el documento a través del que se trasponen los niveles de alerta planteados por el Gobierno central y en el que se estudia la inclusión de restricciones de movimiento entre provincias o áreas de salud en el caso de registrar una muy alta incidencia de Covid.
Igea ha asegurado que el documento pretende contar con una programación y unos criterios «ciertos» para impulsar todas las medidas restrictivas que sean necesarias para el control de la pandemia. «Tenemos que tener un calendario programado y herramientas ciertas para que la población sepa en todo momento a qué atenerse», ha informado.
Para la elaboración de este texto y dentro de los niveles de alerta una de las medidas que baraja la Junta es el confinamiento perimetral de provincias o áreas de salud.
«Hemos reiterado que una de las cosas importantes para disminuir la transmisión es disminuir la movilidad, ayer el presidente recomendó evitar cualquier desplazamiento innecesario», ha manifestado Igea, quien ha avanzando que hay muchas medidas sobre la mesa y que ahora se estudia como adoptarlas y de qué forma.