La segunda noche de disturbios en Cantabria se ha saldado con otros cinco detenidos, un agente herido leve y 15 denunciados por incumplir las restricciones de movilidad nocturna.
En primer lugar la Policía detuvo a tres jóvenes, uno de ellos de 15 años, por el incendio de uno de los contenedores, resultando herido leve uno de los efectivos que intervino en el arresto.
Los otros dos fueron detenidos tras ser reconocidos como implicados en los altercados de la noche anterior, uno de ellos como uno de los agresores a los policías, según ha informado la Jefatura Superior de Policía de Cantabria.
Desde la tarde de ayer la Policía Nacional y la Local habían establecido un dispositivo de seguridad en Santander ante los incidentes de la noche del viernes al sábado. Como refuerzo al mismo, se trasladaron agentes de la Unidad de Intervención Policial (UIP) del País Vasco.
Para ayer había convocada por redes sociales una primera concentración en la Plaza del Ayuntamiento a las 18 horas, en la que no se detectaron participantes ni incidentes; y una segunda en el mismo lugar para las 23 horas. Ambas, al igual que ayer, para manifestarse en contra del toque de queda y de las restricciones impuestas frente al coronavirus.
En esta última participaron unas 50 personas, y aunque «los observaron signos evidentes de que estos jóvenes se plantean acometerles, no llegan a hacerlo y se dispersan ante la primera muestra de reacción de los policías».
En su dispersión resultaron cuatro contenedores quemados y alguna papelera, que fueron «inmediatamente apagados» por los bomberos. Posteriormente ardieron en la calle Canalejas 22 otros tres contenedores contiguos.
Actualmente se ha iniciado la instrucción de diligencias en la Jefatura Superior de Policía Nacional, donde permanecen los detenidos hasta su puesta a disposición judicial.
La Policía no descarta nuevas detenciones tras el análisis de las imágenes y comunicados recopilados en las redes sociales.
