La portavoz del Gobierno catalán, la consellera Meritxell Budó, ha expresado este martes su «preocupación» ante la posibilidad de que el Tribunal Supremo (TS) retire el tercer grado a la exconsellera Dolors Bassa y a la expresidenta del Parlament Carme Forcadell.
Lo ha dicho en rueda de prensa telemática posterior al Consell Executiu, después de que el titular del Juzgado de Vigilancia Penitenciaria 1 de Cataluña ha desestimado la petición de Fiscalía para dar efectos suspensivos a su recurso contra el tercer grado de Bassa y Forcadell, que mantendrán la semilibertad hasta que el Supremo resuelva.
«Lo que me preocupa es que la Fiscalía tiene recurrido este tercer grado en el TS, el tribunal condenatorio. Nos preocupa, porque en los otros casos se les retiró el tercer grado a los presos políticos», ha lamentado.
Para Budó, esta situación evidencia que los presos independentistas no gozan «de los mismos derechos penitenciarios» que el resto, y considera que se visualizará de nuevo si el Supremo retira el tercer grado a Bassa y Forcadell.
También ha recordado que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, insinuó que la Fiscalía dependía del Gobierno, según ella, y ha lamentado: «Está todo dicho».
