Prisión permanente revisable para el hombre que mató a su hijo para hacer daño a su pareja

La Audiencia Provincial de Almería ha condenado a prisión permanente revisable a Ionel M. por el asesinato de su hijo de ocho años de edad en el sótano de su vivienda en Balerma (Almería), a donde lo condujo deliberadamente para degollarlo por la espalda con un cuchillo que llevaba escondido como acto para dañar a su pareja, al que también maltrataba.

El fallo, ante el que cabe recurso de apelación, impone además al acusado otros 12 años y medio de prisión por un delito de maltrato, dos delitos de lesiones psíquicas y otros dos más contra la integridad moral, ya que el hombre llevó a su otro hijo de once años ante el cadáver de su hermano solo para mostrárselo.

Se trata de la tercera ocasión en la que la Audiencia Provincial de Almería impone la máxima pena que contempla el Código Penal tras las condenas a Francisco Salvador S.G. por el crimen machista de Huércal de Almería –ya ratificada por el Tribunal Supremo– y la de Ana Julia Quezada, como autora del asesinato del pequeño Gabriel Cruz, tras la celebración de sus respectivos juicios con jurado.

Según la sentencia, el hombre llevó a cabo el asesinato «como último acto de venganza y control» sobre la mujer, quien días antes le había anunciado su intención de separarse de él mientras que el acusado insistía en que marcharan juntos a Rumanía, su país de origen. Desde que la mujer empezó a trabajar en un invernadero en 2016 fue sometida «a un control cada vez mayor, obsesionado con que ella tenía un amante».

Fue entre las 15,00 y las 15,45 horas del 20 abril de 2018 cuando el acusado, que se encontraba en el domicilio familiar de la Avenida del Mar de Balerma acompañado de sus dos hijos de ocho y once años, pidió al menor de ellos que le acompañara al sótano, a donde acudieron mientras él portaba un cuchillo escondido.

Así, cuando el menor estaba de espaldas a él, «confiado al estar con su padre y sin posibilidad de huida en dicho habitáculo», fue atacado «de manera sorpresiva e intencionada» con el arma, con la que le dio varios cortes en el cuello sin que el pequeño pudiera hacer nada por defenderse. Una vez acabó con su vida, el hombre llevó a su otro hijo al sótano para mostrarle el cuerpo sin vida de su hermano y decirle que a él no lo mataría, causándole lesiones psíquicas.

Tras lo ocurrido, el condenado llamó a su esposa para decirle que había matado al menor de sus hijos, de forma que cuando llegó a la vivienda le dijo que la culpa de la muerte «era suya» por «no querer irse a Rumanía con él, pudiendo ahora quedarse ella con su amante, que él se iba a la cárcel». Durante el trayecto, la mujer también recibió la llamada de su otro hijo, quien le contó que su padre le había mostrado el cadáver de su hermano.

La mujer sufrió un menoscabo psíquico, presentando síntomas de trastorno de estrés postraumático a consecuencia de los hechos. Asimismo, tanto el menor como su madre fueron víctimas del daño moral «irreparable» al que los sometió el acusado al responsabilizarlos de la muerte del pequeño, ante la que precisaron tratamiento psicológico.

Por estos hechos, en los que se tuvo en cuenta la atenuante de confesión y las agravantes de parentesco, se impone una pena de dos años por maltrato, otras dos de cuatro años por lesiones psíquicas y dos más de un año y medio y un año de prisión por delitos contra la integridad moral. Además, el acusado deberá abonar 360.000 euros de indemnización para la madre y hermano del menor fallecido, toda vez que le retira la patria potestad y ordena el alejamiento y la incomunicación con las víctimas.

El teléfono 016 es el número de información y asesoramiento jurídico para las víctimas de violencia machista y su entorno. Funciona las 24 horas, es gratuito y no deja rastro en la factura telefónica, aunque puede quedar registrado en ciertos terminales. Las personas con discapacidad auditiva o del habla pueden contactar por mensaje de texto en el número 900116016.