La Deficiencia de Vitamina D Afecta a las Personas con Covid-19

Se ha descubierto que una gran cantidad de personas que padecen del COVID-19 tienen niveles bajos de vitamina D, según distintos estudios. Si bien los estudios no prueban causa y efecto, respaldan la noción de que la vitamina D podría proteger contra las complicaciones de del Coronavirus.

Los expertos afirman que los niveles sanguíneos saludables de vitamina D pueden brindar una ventaja de supervivencia al ayudar a las personas con Covid-19 a evitar una tormenta de citocinas, cuando el sistema inmunológico reacciona de forma exagerada y comienza a atacar las propias células y tejidos de tu cuerpo.

El papel de la vitamina D en la regulación del sistema inmunológico, incluida su capacidad potencial para suprimir la producción de citocinas peligrosas, es bastante popular. De igual manera la luz solar y la vitamina D desde tiempo atrás se han relacionado con la reducción de la tasa de mortalidad, esto se ha evidenciado en estudios asociados a pandemia de influenza de 1918-1919. En base a estos estudios, cuando surgió la investigación sobre el papel de las citocinas en el Covid-19, los investigadores se centraron más en el papel de los niveles de la vitamina D.

Estimaron la asociación entre la vitamina D y el Covid-19 (en situaciones graves) basándose en un vínculo potencial entre la deficiencia de vitamina D y la proteína C reactiva, o PCR, un marcador sustituto del Covid-19. Estas proteínas son producidas por el hígado en respuesta a la inflamación para disminuir el daño de la infección.

La relación entre la vitamina D y el Covid-19

A través de estudios e investigaciones se determinó que aproximadamente un aproximado del 17% de los pacientes con deficiencia de vitamina D pueden contraer una infección grave por Covid-19, pero solo alrededor del 14% de los que cuentan con niveles saludables de vitamina D tienen una mayor probabilidad de recuperarse sin inconvenientes. Esta diferencia es estadísticamente significativa.

Afortunadamente, un análisis de sangre puede detectar si tus niveles de vitamina D son saludables o deficientes. Se necesita un nivel de 20 nanogramos por mililitro o más para mantener la salud ósea; menos de 12 nanogramos/ml se denomina deficiente.

La vitamina D también ayuda a regular el crecimiento celular y reduce la inflamación. Algunas investigaciones sugieren que podría ayudar a prevenir y tratar la diabetes, la presión arterial alta y los problemas de azúcar en la sangre. Por lo tanto, mantener este nutriente en un buen nivel es beneficioso en distintos sentidos.

¿Es realmente beneficiosa la vitamina D para combatir el Covid-19?

Si bien las primeras investigaciones sobre la vitamina D y el Covid-19 apenas están comenzando, otras investigaciones han encontrado que los suplementos de vitamina D pueden ayudar a reducir el riesgo de infección respiratoria. Dado a que los investigadores que analizaron la pandemia de influenza de 1918-1919 encontraron que los pacientes con niveles saludables de vitamina D en sangre tenían menos probabilidades de morir, el grupo de Backman considera que esto también puede aplicarse actualmente con el Coronavirus.

La investigación que vincula los niveles de vitamina D y las citocinas del Covid-19 se encuentra en sus primeras etapas todavía, pero ha arrojado excelentes resultados en base a lo indicado por la universidad de Cantabria y publicado en la revista médica Journal of Clinical Endriconology & Metabolism. De hecho, la vitamina D funcionaría como un negociador porque no suprime el sistema inmunológico sino que lo modula. La vitamina D hace que las células inmunitarias sean menos inflamatorias.

Si bien la investigación encuentra que los niveles bajos de vitamina D pueden afectar la gravedad del Covid-19, aún no se sabe si restaurar la vitamina D a niveles normales ayudaría como tratamiento. Nadie puede decir con certeza que tener un nivel saludable de vitamina D te ayudará a evitar el virus.

Por consiguiente, momentáneamente se tiene mediante estudios que el nivel de vitamina D tiende a ser más bajo en aquellas personas en estado crítico y más alto en aquellas con una infección más leve. Esto conlleva a la idea de que los suplementos posiblemente podrían mejorar los resultados clínicos de los pacientes infectados con Covid-19.