La Mesa del Congreso ha vetado este miércoles, con los votos de PSOE, PP y Vox, la comparecencia ante la Comisión de Interior del ministro del ramo, Fernando Grande Marlaska, para dar cuenta de la denominada ‘Operación Voloh’, relativa al presunto desvío de fondos públicos al proceso independentista catalán, pero ha dado vía libre a su comparecencia para que explique las filtraciones de parte de las grabaciones realizadas en el marco de la misma.
El secretario primero de la Mesa y diputado de En Comú, Gerardo Pisarello, ha anunciado en rueda de prensa que el órgano de gobierno ha inadmitido, en contra del criterio de Unidas Podemos, la petición de comparecencia registrada por Junts para que el ministro informara a la Cámara de la citada operación.
Según ha explicado Pisarello, el PSOE, el PP y Vox han vetado esa solicitud con el argumento de que el ministro del Interior no tiene competencias sobre una operación que tiene un origen judicial.
La decisión se ha adoptado siguiendo el criterio fijado por los servicios jurídicos de la Cámara, que según han precisado a Europa Press fuentes parlamentarias, habían avisado de que «tratándose de una investigación ordenada por la autoridad judicial, podría versar sobre materia ajena a la competencia del Gobierno».
Unidas Podemos ha votado a favor de que se aceptase la comparecencia y también tiene registrada, junto con las formaciones independentistas de la Cámara, una petición para que se cree una comisión de investigación sobre este asunto.
Pisarello ha subrayado que se trata de una «operación policial» que está «bajo sospecha» y ha denunciado que se hayan filtrado conversaciones privadas que fueron grabadas en el marco de la misma, como las protagonizadas por el portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián.
El diputado de En Comú ha recordado que «no es la primera vez que se filtran» grabaciones con el objetivo de «criminalizar a la disidencia política» y prácticamente ha dado por hecha la existencia de un «brazo policial» que actúa al margen del Gobierno. «Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad y los estamentos judiciales tienen la obligación de actuar con absoluta imparcialidad», ha incidido.
Asimismo, ha criticado que, al menos en un primer momento, esa operación fuera bautizada con el nombre de ‘Volhov’ –así figuraba en la nota de prensa con la que se informó de la misma–, el río ruso en el que se enfrentaron tropas nazis y soviéticas en la Segunda Guerra Mundial. Para Pisarello, ya sólo la elección de ese nombre «justificaría la petición de una investigación» o incluso «dimisiones».
SIGUE PENDIENTE COMISIÓN DE INVESTIGACIÓN
Según han precisado fuentes parlamentarias, aunque la Mesa ha vetado la petición de Junts sobre la petición de cuentas a Marlaska, en la misma reunión ha dado vía libre a la que había registrado ERC pidiéndole explicaciones, también ante la Comisión de Interior, sobre las filtraciones de grabaciones realizadas durante la investigación policial, en una de las cuales aparece su portavoz, Gabriel Rufián.
El escrito de ERC sí ha pasado el filtro de la Mesa porque no requiere la presencia del ministro para dar cuenta de la investigación en concreto, sino de «las filtraciones de las investigaciones que llevan a cabo las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado».
La Mesa del Congreso volverá a pronunciarse la semana que viene sobre la petición de que una comisión específica investigue esas filtraciones, así como sobre una batería de preguntas sobre el tema registradas por ERC.
