jueves, 12 diciembre 2024

Arrimadas tiende la mano a Sánchez para apoyar los PGE

La presidenta de Ciudadanos, Inés Arrimadas, ha garantizado este jueves que su formación tendrá «la mano tendida» al Gobierno «hasta el final» para apoyar los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2020 si se aceptan sus líneas naranjas y ha recalcado ante la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, que «no es necesario» que el Ejecutivo «tenga que soportar las humillaciones» del líder de EH Bildu, Arnaldo Otegi, «diciendo que decide el futuro de España».

Durante su intervención en el debate de las enmiendas de totalidad de las cuentas públicas, la líder de Cs ha pedido a los socialistas que escuchen al sector «moderado» de su partido y del Ejecutivo que no quiere que los Presupuestos se aprueben con la coalición abertzale.

En su opinión, una formación socialdemócrata como el PSOE tendría que considerar «antagónico» no al PP, sino al nacionalismo, que «es lo más de derechas y lo más retrógrado y sectario», en vez de intentar justificar como «lógico» el pactar con Bildu.

RADICALIDAD ECONÓMICA Y CACICADAS NACIONALISTAS

También ha dejado claro que «no es necesario» el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, «acepte esa humillación» de su vicepresidente y líder de Podemos, Pablo Iglesias, «diciendo ‘aquí estoy yo y me impongo ante la vía del PSOE.

Aunque Sánchez no estaba presente en el hemiciclo, Arrimadas se ha dirigido a él directamente para recalcar que «va a tener que elegir» si quiere pactar los PGE con Bildu y con ERC o si prefiere hacerlo con Ciudadanos. La primera opción, a su juicio, supone escoger «radicalidad económica y cacicadas nacionalistas», y la segunda representa «moderación económica e igualdad entre los españoles».

«Se acabó el juego, ha llegado la hora de la verdad», ha afirmado, destacando que la mano tendida que ofrece la formación naranja es «seria, fiable y responsable». Y si el Ejecutivo no la coge, «jamás podrán volver a decir que no lo hacen porque no tuvieron otra opción o porque les ha obligado una oposición irresponsable que no quiere sentarse a negociar», ha enfatizado.

«ESTOY HACIENDO LO CORRECTO»

La presidenta de Cs ha reivindicado la posición de su partido desde el comienzo de la pandemia del coronavirus al entender que era necesario que todos «arrimaran el hombro para salvar vidas y empleos», tanto en el ámbito nacional como en comunidades autónomas y ayuntamientos.

«Yo estoy muy tranquila y muy fuerte porque estoy haciendo lo correcto» para conseguir ese objetivo, pero «otros están pensando en cuánta gente les va a votar cuando lleguen las próximas elecciones», ha manifestado después de que Montero reconociera que para Ciudadanos debe de ser difícil mantener su postura pese a las presiones externas e internas.

En relación con los Presupuestos, ha explicado que no han querido presentar la que habría sido la octava enmienda a la totalidad, que habría sido rechazada este jueves en el Congreso como las otras siete, incluidas las del PP y Vox, y han optado por dialogar con el Gobierno para hacer sus propuestas y tratar de mejorarlos. «Otros gritan mucho pero no consiguen nada», ha agregado.

Aun así, ha aclarado que esto no significa que Ciudadanos vaya a votar a favor de las cuentas públicas al final de la tramitación parlamentaria y ha recordado que han puesto varias condiciones al Gobierno del PSOE y Unidas Podemos.

PP Y PSOE SIEMPRE RECURREN A LOS VOTOS NACIONALISTAS

Entre ellas, que la ‘ley Celaá’ de educación no confirme la exclusión del castellano como lengua vehicular en las escuelas de Cataluña y de otras comunidades autónomas. Según ha apuntado, ha sido Esquerra quien ha vinculado esta cuestión a la negociación de los Presupuestos y por eso Cs exige ahora al Ejecutivo que rectifique a cambio de apoyarlos.

Arrimadas considera que esa medida pactada con ERC supone «volver a humillar a las familias» que quieren escolarizar a sus hijos en castellano y no solo en las otras lenguas cooficiales. Durante 40 años, el PP y el PSOE «no se han puesto de acuerdo» sobre los Presupuestos y «siempre acuden a los partidos nacionalistas», y una vez más «nos han vuelto a vender por un puñado de votos en el Congreso», ha denunciado.

Según ha señalado, Cs persigue dos objetivos al ofrecerse a negociar los PGE. El primero es evitar nuevas «concesiones al separatismo» y el segundo es «quitar locuras podemitas» del proyecto de ley, lo cual cree que ya se ve reflejado en las «líneas naranjas» que se han plasmado en el proyecto de ley.

De hecho, cree que ese es el motivo por el cual el portavoz de Unidas Podemos en la Cámara Baja, Pablo Echenique, se ha mostrado «un poco molesto» durante su intervención en el debate.

«Para no haber conseguido nada» Ciudadanos en sus conversaciones con el Gobierno, como dice Echenique, resulta «un poco desproporcionado dedicar la mitad de su discurso a hablar de Ciudadanos», ha comentado Arrimadas, que piensa que para Podemos «no es plato de buen gusto» ver los logros de Cs.