El Gobierno de España se ha felicitado este jueves del «progresivo encauzamiento de la crisis institucional» en Perú con la designación de Francisco Rafael Sagasti como presidente de la República, tras la destitución de Martín Vizcarra y la dimisión un día después de Manuel Merino.
El Ejecutivo español ha reiterado además la importancia del mantenimiento de una convocatoria electoral general para el 11 de abril que permita «consolidar la estabilidad necesaria para hacer frente a los importantes desafíos que enfrenta el país, que al igual que el resto del mundo, se ha visto seriamente afectado por la pandemia».
En este contexto, el Gobierno de Pedro Sánchez han reiterado su llamamiento a todos los actores peruanos a apoyar de forma constructiva dicha salida institucional, según ha indicado el Ministerio de Asuntos Exteriores en un comunicado.
Asimismo, ha pedido que se lleven a cabo «las investigaciones correspondientes» los incidentes ocurridos durante las protestas registradas tras la destitución de Vizcarra.
En la misma línea, ha reclamado que se depuren las responsabilidades que procedan tras unas movilizaciones que han dejado dos fallecidos, un centenar de heridos y varias personas desaparecidas en medio de los enfrentamientos entre los ciudadanos y la Policía de Perú.
«España como país hermano de Perú seguirá acompañándole de cerca en este proceso», ha señalado el departamento que dirige Arancha González Laya.
El Ejecutivo español se sumó esta misma semana a la «preocupación» expresada por la Oficina de la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, el Tribunal Constitucional o la Defensoría del Pueblo de Perú en relación a la respuesta de las autoridades ante las protestas.
En este sentido, el Gobierno español reiteró que el derecho de manifestación pacífica «es un pilar de la democracia y que la actuación de mantenimiento del orden público de las fuerzas de seguridad debe atenerse a los estándares internacionales».
Los acontecimientos se han precipitado en Perú, donde el pasado 9 de noviembre el Congreso aprobó una moción de censura contra el presidente Martín Vizcarra, forzando así el ascenso del hasta entonces presidente del Congreso, Manuel Merino.
Sin embargo, esto ocasionó de forma inmediata protestas que se saldaron con la muerte de dos manifestantes, lo que empujó a Merino a presentar su renuncia un día después, tras lo cual el Congreso eligió a Francisco Sagasti como presidente del país.
La Fiscalía de la nación andina ha anunciado la apertura de una investigación preliminar contra el expresidente, el ex primer ministro Ántero Flores Aráoz y el exministro de Interior Gastón Rodríguez por la muerte y la desaparición de manifestantes.
Están acusados de los presuntos delitos de abuso de autoridad, homicidio doloso, lesiones graves, leves y desaparición forzada en agravio de personas a determinar, delitos cometidos en el contexto de violaciones de los Derechos Humanos.
