Agentes de la Policía Nacional de Elche (Alicante) han desmantelado una organización criminal dedicada a la trata de seres humanos con fines de explotación sexual. En el marco de la operación ‘Virgencita’, han liberado a una mujer de origen nicaragüense y han detenido a cuatro personas que la explotaban sexualmente por distintos locales de la ciudad.
La operación, desarrollada gracias a la denuncia de una víctima, ha conseguido eliminar la vía de reclutamiento que conectaba los países de origen en el centro o sur de América con España, ha informado la Policía Nacional en un comunicado.
Durante la primavera del 2018, Nicaragua sufrió una crisis política y económica que obligó a que muchos nicaragüenses tuvieran que emigrar a otros países en tal de poder buscar una oportunidad. Esta situación de desesperación por la que pasaron miles de personas hizo que se aferraran a cualquier oportunidad, por complicada que ésta pudiera ser, y sin apenas tiempo de estudiarla o meditarla.
Esto mismo le ocurrió a esta joven de ese país, cuando en agosto de ese mismo año, una supuesta amiga la invitaba a viajar a España con la promesa de que iba a tener «una vida mejor», sin ninguna otra información sobre el trabajo que iba a desempeñar.
Sin apenas pensarlo y con tal de salir de la situación de necesidad en la que se encontraba, junto con su familia, aquella joven de 18 años decidió subirse a un avión por primera vez en su vida y cruzar el atlántico.
Al día siguiente de su llegada, la víctima fue informada por parte de su amiga que a partir de ese mismo momento trabajaría como prostituta para poder pagar la deuda que tenía contraída con ella al haberle comprado los billetes de avión utilizados.
Tal y como manifestó la víctima ante la policía, la decisión de denunciar su situación «no fue nada fácil». Según ha explicado la Policía, sus captores utilizaron el ambiente de vulnerabilidad en el que se encontraba la víctima para coaccionarla. En este sentido, la amenazaban con denunciarla por estancia ilegal, a pesar de encontrarse legalmente en España hasta el cumplimiento de los noventas días desde la fecha de entrada en España. También abusaron de ella sexualmente y amenazaron a su familia, residente en Nicaragua.
Todo lo que iba recaudando la víctima diariamente por el ejercicio de la prostitución le era confiscado por parte de la red criminal, en concepto de «pago de deuda», pero, a su vez, le iban sumando gastos desproporcionados de comida, ropa o alojamiento, entre otros, de tal forma que a medida que iban pasando los días la deuda aumentaba, motivo por el cual decidió denunciarlo a la Policía.
Esta operación se enmarca dentro Plan Policial contra la trata de seres humanos con fines de explotación sexual. El objetivo de la Dirección General de la Policía es «dar respuesta al imperativo ético de luchar contra cualquier forma de trata de seres humanos», una «lacra» que tiene como víctimas principales a mujeres que son traídas a España mediante engaños y que son obligadas mediante amenazas e incluso agresiones a prostituirse.
La Policía Nacional tiene habilitadas dos vías para denunciar este tipo de hechos. Por un lado, el teléfono gratuito 900105090, atendido las 24 horas por policías especializados de la Brigada Central contra la Trata de Seres Humanos, y el correo electrónico trata@policia.es. Ambos medios preservan la confidencialidad de sus usuarios. Además, este Plan creó también un espacio propio dentro de la página web oficial de la Policía Nacional (www.policia.es/trata), que sirve de canal adicional de información sobre este delito.