El ex DAO dice que Ignacio Cosidó estaba al corriente de la ‘Kitchen’

El exdirector adjunto operativo (DAO) Eugenio Pino ha afirmado este lunes ante el juez de la Audiencia Nacional Manuel García Castellón que el ex director general de la Policía Nacional y ex senador del PP Ignacio Cosidó estaba al corriente de la conocida como ‘operación Kitchen’, creada en 2013 para espiar al entorno familiar del extesorero ‘popular’ Luis Bárcenas.

Así lo ha dicho durante su declaración como investigado ante el titular del Juzgado Central de Instrucción número 6, que le ha citado para confirmar si él era el autor de uno de los mensajes en los que el ex secretario de Estado de Seguridad Francisco Martínez protocolizó ante notario.

La declaración del ex DAO, que sólo ha contestado al juez instructor del caso ‘Tándem’ y a la Fiscalía Anticorrupción, ha tenido lugar justo después de conocerse un informe de la Unidad de Asuntos Internos aportado a la causa sobre el volcado de los mensajes de Martínez, entre ellos los que cruzó con Pino sobre el operativo parapolicial montado con el objetivo de sustraer la información sensible del PP que guardaba Bárcenas.

Fuentes jurídicas presentes en la declaración han informado que Anticorrupción ha hecho un interrogatorio exhaustivo sobre estas conversaciones, en las que aparecen mencionado Cosidó.

Ha sido entonces cuando Pino ha negado haber despachado en alguna ocasión sobre la ‘Kitchen’ con el exminsitro del Interior Jorge Fernández Díaz, si bien sí que ha apuntado hacia el ex director de la Policía afirmando que él mismo le informó sobre el espionaje a Bárcenas. En este sentido, ha señalado que Cosidó estaba al corriente de todo.

El su anterior declaración como investigado, Pino ya apuntó a la cúpula política policial como conocedora de determinados detalles de la operación ‘Kitchen’. En ese momento dijo que no recordaba si fue Martínez o Cosidó quien le habló de lo poco conveniente que era que el jefe de Asuntos Internos, Marcelino Martín-Blas, también imputado en esta causa fuera quien controlara al chófer de Bárcenas, Sergio Ríos, como confidente. Por eso, la defensa de Martín-Blas solicitó la declaración como testigo de Cosidó, que aún no ha sido resuelta por el juez.

EL MENSAJE VIENE «DE ARRIBA»

En cuanto al mensaje concreto por el que ha sido llamado a declarar, que informaría de que «la información se hizo con éxito» en referencia al volcado de la información que contenían «2 iphones y 1 ipad» que presuntamente serían del extesorero ‘popular’, el ex ‘número dos’ de la Policía ha asegurado que no es su autor y ha puntualizado que por el lenguaje en el que está escrito no parece que sea una fuente policial, según las fuentes consultadas.

En esta línea se ha manifestado también el que fuera jefe de la Unidad Central de Apoyo Operativo (UCAO) Enrique García Castaño, que también ha declarado como investigado este lunes por este mismo asunto. García Castaño también ha negado ante el juez ser el emisor de ese mensaje y ha recalcado que esa información que Fernández Díaz reenvió no le debió de llegar de un mando policial, sino de alguien que lo remitió de «arriba a abajo».

De este modo, el ex jefe de la UCAO, ha descartado la tesis del magistrado instructor, de que el mensaje tuviera su origen en la cúpula policial. Aún así, García Castaño, que en varias ocasiones ha manifestado su voluntad de colaborar con la Justicia, ha indicado que la persona que escribió ese mensaje tenía mucha información, pero inexacta, ya que, según ha precisado, no se recopilaron los archivos de ningún ipad.

COSPEDAL CONTROLARÍA A VILLAREJO

Por otro lado, en la declaración de Pino también ha salido a relucir el nombre de la ex secretaria general del PP y ex ministra de Defensa María Dolores de Cospedal, para quien la Fiscalía Anticorrupción ha pedido su imputación en esta pieza 7 del caso Tándem.

Según las fuentes jurídicas presentes en la declaración, el ex ‘número dos’ de la Policía ha sido preguntado por si conocía si Cospedal y su marido, Ignacio López del Hierro, tenían relación con Villarejo, a lo que ha contestado que todo apuntaba a que eran los que controlaban al comisario jubilado. No obstante, ha añadido que se basaba en una especulación.

Por otro lado, en relación al extenso interrogatorio sobre las conversaciones de ‘whatsapps’ entre Pino y Francisco Martínez, el ex DAO ha relatado su teoría sobre el origen del caso ‘Tándem’, por la que el comisario jubilado José Manuel Villarejo lleva en prisión provisional desde noviembre de 2017.

«BLINDAJE» AL REY

Según ha dicho, la primera línea de investigación de esta macrocausa –que acumula una treintena de piezas separadas– sobre la entrada ilegal en España de ciudadanos de Guinea Ecuatorial fue una excusa para «blindar» al rey emérito Juan Carlos I y evitar que salieran las grabaciones que Villarejo tenía de la empresaria alemana Corinna Larsen.

Ha empezado explicando que cuando salieron las primeras noticias en prensa sobre Villarejo se puso en contacto con el inspector jefe de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF), Manuel Morocho –quien ha realizado la investigación del caso Gürtel y los ‘papeles de Bárcenas’– para que analizara si podía ser objeto de investigación y que éste se lo pasó al comisario general de Policía Judicial.

El nombre de Morocho no ha quedado ahí, pues el juez García Castellón ha expresado su disconformidad con que Pino le entregara la medalla ‘roja’ al inspector –pensionada con un 10 por ciento del salario– cuando a su parecer no cumple los requisitos marcados por la ley, han señalado las fuentes consultadas.

El ex DAO ha continuado su relato destacando que, pese a que Policía Judicial descartó investigar a Villarejo porque no veía que encajara por la vía de Asuntos Internos, el Centro Nacional de Inteligencia (CNI), dirigido entonces por Félix Sanz Roldán, empezó a tener mucho interés en las cuentas de Villarejo e incluso pidió su detención. Así, ha enmarcado el conocido como caso Villarejo en una pugna entre éste y el ex director del CNI.

En este contexto, Pino ha asegurado que cuando Villarejo le reportó que tenía información sobre las cuentas del Don Juan Carlos, le prohibió por escrito que investigara sobre ellas, al igual que, en otro momento, advirtió a Sanz Roldán de las consecuencias que podría tener la detención de Villarejo, ya que sabía que éste guardaba cintas que podría afectar a Casa Real.

Por ello, cree que la denuncia anónima por la que la Fiscalía Anticorrupción comenzó a investigar al comisario jubilado en abril de 2017 era una maniobra del CNI para proteger al rey emérito, según las fuentes consultadas, que han señalado que el ex DAO también ha indicado que el cuerpo de inteligencia no era ‘manejado’ por Sanz Roldán, sino por la ex vicepresidenta del Gobierno Soraya Sáenz Santamaría.

LOS NOTARIOS NO COMPROBARON EL ORIGEN DE LOS MENSAJES

El juez de la Audiencia Nacional también ha escuchado a los dos notarios a los que el ex secretario de Estado de Seguridad acudió para protocolizar los mensajes que supuestamente se había intercambiado con Fernández Díaz sobre la ‘Kitchen’. Unas conversaciones que el ex ministro del Interior niega haber tenido.

Los dos notarios, Enrique A. Franch Quiralte y Alberto Vela Navarro-Rubio, que han comparecido en calidad de testigos, han defendido su labor y han explicado que se limitaron a registrar los mensajes que el ex ‘número dos’ de Interior les entregó. En este sentido, han confirmado que no comprobaron quien era el autor del mensaje, ya que su misión era dar fe de los textos.