El ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, ha manifestado que la reforma que comienza a tramitarse este martes en el Congreso de los Diputados, dirigida a impedir que los vocales del Consejo Del Poder Judicial (CGPJ) puedan realizar nombramientos discrecionales estando en funciones, «está en línea» con lo señalado por la propia Comisión Europea «en cuanto a la necesidad de renovar» el órgano de gobierno de los jueces.
Así lo ha señalado al ser preguntado sobre la tardanza en la renovación de este órgano durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, donde ha llegado a decir que le produce «cierto sonrojo» la negativa del PP a retomar las negociaciones para acordar los nombres de los 20 vocales que deben sustituir a los que han sobrepasado su mandato.
«Hay un Gobierno que se ocupa de modernizar la Administración de Justicia y hay otros que intentan bloquear la renovación del Consejo de manera tozuda», ha señalado, para apuntar que la renovación o no del CGPJ «no es opinable» porque hay un mandato constitucional que hay que cumplir». «Ser constitucionalista a tiempo parcial no es aceptable en democracia», ha añadido, en referencia a la actitud del PP.
Así, y tras señalar que la proposición que se discute esta tarde está en consonancia con las consideraciones que hizo la Comisión Europea el pasado 30 de septiembre, ha señalado que ello constituye una «llamada de atención al PP», en cuanto a cuál es la obligación constitucional de los partidos políticos.
Los del PP que se miren al espejo que vean si cumplen con la Constitución», ha insistido a preguntas de los periodistas, si bien ha eludido responder si el Gobierno dará un plazo máximo al principal partido de la oposición para avenirse a pactar la renovación.
«Hay un plazo razonable que determinan los tribunales europeos, pero se están agotando los plazos de cortesía y no se les va a permitir, la Constitución es la norma de convivencia y hay que respetarla y garantizarla», ha manifestado el titular de Justicia.