Gobierno catalán achaca el repunte a reapertura de comercios y actividades

El conseller de Interior de la Generalitat, Miquel Sàmper, ha atribuido el aumento de la velocidad de la propagación del Covid-19 y del repunte de casos registrados en Cataluña los últimos días a que el Govern haya atendido la «solicitud y clamor unánime de gran parte de la sociedad» de reabrir comercios y actividades.

Durante su intervención en el pleno del Parlament este miércoles, ha argumentado que durante la segunda ola de Covid-19 el Govern ha optado por gestionar la pandemia «teniendo en cuenta el binomio salud-economía» que, según él, era una de las peticiones de los sectores sociales y económicos.

Sámper, que ha afirmado que hay una «evidente y clara tendencia a la alza» del riesgo de rebrote y del empeoramiento de la situación epidemiológica en Cataluña, ha dicho que es responsabilidad del conjunto de la ciudadanía que se siga priorizando el binomio salud-economía.

Ha explicado que durante la semana posterior al Día de Acción de Gracias en Estados Unidos se registró un gran aumento de casos de coronavirus en la población norteamericana: «¿Qué nos hace pensar que a nosotros no nos puede pasar lo mismo después de las Navidades?»

Por eso, ha pedido limitar la interacción antes de Navidad, reducir al mínimo las personas en los encuentros durante las fiestas y posponer los encuentros: «Celebremos las Navidades en febrero o marzo, con hasta cinco burbujas, pero cuando tengamos a los grupos de riesgo vacunados».

Además, ha llamado a reducir la movilidad –pese a que el Govern aprobó la semana pasada el confinamieno comarcal de fin de semana, en lugar del municipal– y ha insistido en la necesidad de ventilar y acondicionar los espacios cerrados de manera óptima para reducir el riesgo de contagio.

Según él, Catalunya no se puede permitir un confinamiento como el vigente en Alemania, Francia o Holanda, por lo que ha apelado a la responsabilidad ciudadana: «Hagamos un último intento por ser cuidadosos y serios con nuestras decisiones. No pongamos los deseos personales antes de los deseos sociales».