Gobierno Vasco dice que la situación ha mejorado, pero no significa que sea buena

El secretario general de Transición Social y Agenda 2030 del Gobierno Vasco y coordinador de la comisión técnica del LABI, Jonan Fernández, ha asegurado este viernes que la actual situación epidemiológica en Euskadi ha mejorado «bastante», comparada con la de principios de noviembre, pero ha advertido de que «eso no significa que sea buena».

En una entrevista concedida a ETB1, Fernández ha señalado que la comisión técnica del LABI, que se encuentra reunida desde las 10.00 horas analizará los datos tanto de Euskadi, como del Estado y de Europa, para concretar «qué es lo que hay que hacer desde un punto de vista científico y mantener o apretar las actuales medidas».

«Los datos son conocidos, y hemos logrado mejorarlos bastante desde inicios de noviembre. Entonces, la tasa de incidencia acumulada en14 días por 100.000 habitantes era 850 casos, y ahora es de menos de 300. Hemos mejorado, pero es no significa que estemos en una buena situación», ha insistido.

Así, ha indicado que, a pesar de que en estos momentos se mantiene una tendencia a la baja, «no muy fuerte pero si a la baja», los datos han sido «contradictorios» durante los últimos siete días, ya que, según ha explicado, «en algunos días se ha visto un estancamiento y ayer, en cambio, se dio un cambio a mejor».

De esta manera, Fernández ha afirmado que las 15 personas que forman la comisión técnica del LABI tienen «distintos puntos de vista científicos» que hay que tener en consideración, y que, en base a la opinión que tome dicha comisión, el LABI tomará las decisiones pertinentes.

En este sentido, ha indicado que, «normalmente o siempre», el LABI acepta el criterio que toma la comisión técnica, ya que, «suelen ser propuestas muy firmes y normalmente se siguen».

En todo caso, Jonan Fernández ha reconocido que gestionar la actual situación «no es fácil», ya que «no sabemos cuales van a ser los cambios en los próximos días». Así, ha citado como ejemplo que, hace cinco días, «la situación en las Islas Baleares era la mejor en el Estado, y ahora, en cambio, es la peor».

«La sociedad debe entender que no es fácil gestionar esto y que debemos tomar decisiones con flexibilidad. Hoy podemos tomar una decisión, pero quizás dentro de siete días debemos tomar otra porque la situación cambia. Si hacemos eso, debemos hacerlo con una comunicación clara y comprensible, y para que sea comprensible debemos decir que esto es complicado, que es cambiante, y tratamos de tomar las decisiones más firmes posibles», ha explicado.