Desde hace unos años, nos hemos acostumbrado a disponer de una serie de electrodomésticos – pequeños y medianos especialmente – que han revolucionado nuestras vidas, pero no miran especialmente por el consumo energético o el ahorro. Uno de los mejores ejemplos es el de las cafeteras de capsulas. Se presentó como una cafetera rápida que nos prepara el café en segundos, con una gama de «sabores» e intensidades muy variada y de elaboración muy limpia, pero además de que las capsulas no son nada sostenibles, este tipo de café nos cuesta bastante más caro al año que la tradicional forma de consumir café de antaño. Entonces ¿hay alguna otra alternativa buena, bonita y barata para el café? Sí, la hay, y nosotros te la contamos a continuación.
1La moda del café en capsulas
Siete de cada diez españoles tienes una cafetera de capsulas en su casa. El éxito de este tipo de cafeteras atiende a una moda como lo hacen los robots de cocina o los robots de limpieza. Buscamos herramientas que nos hagan la vida más fácil, más cómoda y en el menor tiempo posible. Algunos dirán que también nos gustaría que fuese más económica, pero lo cierto es que el café de capsula multiplica por cinco el precio de un café en la típica cafetera italiana que está desapareciendo de los hogares. Entonces ¿porqué triunfa el café en capsulas? Como hemos dicho, es un modelo cómodo y fácil, y que atiende a la tipología de familias actuales. Antes los hogares estaban compuestos por familias grandes, e incluso en un mismo hogar residían varias generaciones. Ahora esto es muy distinto, cada vez más personas viven solas o en hogares de dos miembros, por lo que no es tan descabellado invertir en productos monodosis.