El portavoz de los comuns, Joan Mena, ha dicho esperar que la redacción del decreto por el que el Govern aplaza las elecciones catalanas esté lo suficientemente blindado para que no sea «fácilmente impugnable».
En rueda de prensa este lunes, ha defendido que un decreto como el que el Govern firmó el viernes que cambia la fecha de unas elecciones debe de tener todas las garantías jurídicas, pero frente a eventuales recursos ha advertido de que «será un error volver a judicializar la política en Cataluña».
De este modo, le ha pedido «rigurosidad, honestidad y coordinación» para garantizar que la fecha definitiva de la celebración de las elecciones al Parlament es el próximo 30 de mayo.
Para Mena, es evidente que el ministro de Sanidad y candidato del PSC a la Presidencia de la Generalitat, Salvador Illa, debería pronunciarse acerca del aplazamiento de los comicios, y ha puesto en duda la compatibilidad entre ambos cargos: «No es oportuno que la situación se prolongue».
Aunque ha evitado pronunciase acerca de las declaraciones del vicepresidente segundo del Gobierno y líder de Podemos, Pablo Iglesias, en las que comparaba al expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont con los exiliados por el franquismo, Mena sí ha pedido no «avivar las polémicas impulsadas por la derecha».
Además, ha criticado que desde el ministerio de Justicia se esté «dilatando» la llegada de la reforma del delito de sedición del Código Penal para los líderes independentistas encarcelados por el 1-O.
Por otro lado, ha afirmado que ha llegado el momento de que ERC «sea valiente, se desvincule de JxCat y se abra a nuevos escenarios», y ha mostrado su apoyo a las declaraciones del exdiputado de ERC en el Congreso Joan Tardà, que apuesta por reducir el peso de JxCat en el Govern después de las elecciones catalanas incorporando al Ejecutivo a los comuns y la CUP.
