La Interagrupación de Fallas apela a la tranquilidad y a la «empatía» con el sector tras la suspensión de las fiestas de 2021 en marzo y pide no aventurar fechas hasta que la situación de la pandemia lo permita, con el objetivo de «poder plantar, quemar y tener unas Fallas dignas».
Así lo ha defendido su presidente, Guillermo Serrano, a los periodistas tras una reunión con las líderes autonómica y municipal del PP, Isabel Bonig y Mª José Catalá, y representantes de las fallas de las categorías Especial y 1ªA, ante la situación que atraviesa el sector por dos años sin fiestas.
Tras el «duro golpe» que supone saber que en marzo tampoco habrá fiestas, las comisiones se agarran a «un rayito de esperanza» y reclaman que las Fallas sean incluidas en la Ley de Mecenazgo de la Comunitat para que las empresas que contribuyen con el sector disfruten de beneficios fiscales, una propuesta que respalda el PP y que les permitiría crear recursos propios y autogestionarse «sin depender de nadie».
«Las fallas nos queremos ser subvencionadas por nadie, solo salir del hoyo por nosotros mismos», ha recalcado el portavoz del colectivo, para recordar que las comisiones son «el hombro sobre el que se apoya todo el sector económico que gira alrededor de las Fallas».
Por ello, su principal petición es «un poco de empatía» de las administraciones y que les echen una mano para afrontar 2021, unos meses en los que reconocen que no lo van a pasar bien: «Un euro que se coloca en las fallas no escapa ni de València ni de la Comunitat Valenciana».
Sobre la posibilidad de celebrarlas en julio u octubre, el presidente de Interagrupación ha remarcado que es «prematuro» aventurarse en un momento tan complicado de la pandemia. «Hay mucho tiempo por delante», ha recordado pidiendo tranquilidad a los falleros porque «hay un acuerdo por parte de las instituciones de que se podrán celebrar si es viable».
Sí ve necesario que tanto la Generalitat como el Ayuntamiento de València empiecen a trabajar en los «diferentes escenarios» para poder celebrar las fallas en condiciones: «No hay una fecha ideal, lo ideal es poder celebrar las Fallas; el cómo y el cuándo tendrá que esperar un poco».
Y respecto a la posible celebración de la Ofrenda con restricciones, Serrano ha insistido en que «el planteamiento es poder plantar, quemar y tener unas Fallas dignas» y luego estudiar los actos que se pueden hacer en función de la situación sanitaria.
Desde el minuto uno, los falleros hemos sido responsables, hemos cumplido las normas y nos hemos puesto a disposición de la Conselleria de Cultura y la de Sanidad para ver qué podemos hacer en cada momento. Hablar a 18 de enero de lo que haremos en julio o septiembre no es una buena experiencia con lo que hemos pasado estos mees, hay que esperar», ha insistido.
EL PP PIDE «NO RENUNCIAR» A LAS FALLAS DE 2021
Por parte del PP, Catalá ha denunciado que los falleros sufren el «anuncio sorpresa y poco coordinado» que hizo la semana pasada el alcalde, Joan Ribó (Compromís), de que en marzo no habrá Fallas, por lo que ha pedido que el mensaje sea «claro y realista». «Es evidente que era difícil celebrarlas en marzo, pero esto no supone en ningún momento renunciar al ejercicio fallero», ha defendido.
Ha planteado así la posibilidad de celebrarlas en la segunda mitad de 2021 «si las cosas están mejor», para exigir que las administraciones den «un halo de esperanza a un colectivo con la moral baja por el 10% menos de censo, una situación económica precaria y la posible desaparición de algunas fallas».
La también diputada autonómica ha exigido unas ayudas específicas para las comisiones que lleguen en marzo y estén coordinadas con el Ayuntamiento, además de urgir a que el ‘president’ de la Generalitat, el socialista Ximo Puig, lance un mensaje coordinado con sus socios (Compromís y Unides Podem) y se dejen de «guerritas».
Y ha anunciado una proposición no de ley (PNL) en Les Corts para modificar la Ley de Mecenazgo e incluir tanto las Fallas como las Fogueres de Alicante y las Gaiates de Castellón, a modo de estímulo a largo plazo para que «la cultura valenciana sea ayudada por el sector privado».
