La lasaña es uno de los platos estrella de la gastronomía italiana y también uno de los más populares en España cuando de pasta se trata. Sin embargo, son varias las dudas que existen respecto a su preparación. Es por ello que muchas personas optan por comprarla ya hecha en el supermercado en lugar cocinarla en casa. A menudo tendemos a pensar que preparar una lasaña es muy complicado y que nos puede llevar horas. Pero no hay nada más alejado de la realidad. Una auténtica lasaña se puede cocinar de manera muy sencilla y en no mucho tiempo. Además es un menú perfecto para el frío invierno. Aquí te daremos algunos trucos para que hacer la lasaña de carne a la boloñesa definitiva.
Un poco sobre los orígenes de la lasaña
De más está decir que la lasaña es originaria de Italia. Según el historiador John Dickie, autor del libro «Delizia! La historia épica de la comida italiana«, la palabra «lasagna» proviene del término latín «laganum‘», una lámina de masa que se utilizaba antiguamente en Roma para hacer pasta.
La lasaña apareció por primera vez en un libro de cocina a mediados del siglo XIV. Su receta figuraba en el manuscrito titulado «Libro per cuoco». Aquella fue una de las primeras publicaciones gastronómicas de Europa. El texto consideraba a la lasaña un plato típico de Cuaresma. En su momento se preparaba con nueces molidas, especias y azúcar. Con el correr del tiempo la receta ha ido evolucionando y la lasaña actual poco tiene que ver con aquella de la Edad Media.
