La comisión Kitchen aprobará el jueves sus primeras comparecencias

La comisión del Congreso encargada de investigar la ‘Operación Kitchen’ tiene previsto acordar el próximo jueves la primera lista personas que llamará a comparecer y que el PSOE quiere que sean los mandos policiales implicados en el entramado supuestamente urdido desde el Ministerio del Interior en la etapa de Jorge Fernández Díaz en busca de pruebas que pudieran implicar a dirigentes del PP en casos de corrupción.

Así lo ha acordado este viernes la mesa de la comisión tras aprobarse el plan de trabajo para la misma presentado por el PSOE y Unidas Podemos y una vez rechazada la pretensión del PP de parar los trabajos hasta después de las elecciones catalanas.

Según ha detallado el vicepresidente de la comisión y diputado de IU en el Congreso, Enrique Santiago, se ha abierto ya un plazo para que los distintos grupos puedan registrar sus peticiones de documentación y de comparecencias.

Ese plazo concluye el próximo miércoles a mediodía y será al día siguiente cuando la comisión se vuelva a reunir para elaborar ya esa primera lista de citaciones y decidir qué peticiones de documentación se cursan.

SIN TOPE PARA HACER PETICIONES

Conforme al plan de trabajo acordado, cada formación podrá registrar un número ilimitado de peticiones, tanto de comparecencias como de documentación. Eso sí, respecto a los documentos, sólo se solicitarán los que apruebe la mesa de este órgano y, en cuanto a las comparecencias, se sustanciarán las que sean acordadas por la comisión.

Santiago ha explicado se ha evitado poner cupos para que todos los grupos «se puedan sentir partícipes» y se logren «grandes acuerdos» y ha recordado que la lista de comparecientes se irá ampliando en función de cómo evolucione la investigación. En principio la comisión trabajará durante tres meses, aunque ese plazo se podrá prorrogar.

El PSOE quiere, según ha avanzado su portavoz, Felipe Sicilia, que los primeros en acudir sean los mandos policiales implicados en la trama. A su juicio, el testimonio de los agentes con «entidad política» puede servir para poner «en contexto» a la comisión, aunque más adelante se cite a otros miembros del cuerpo.

FERNÁNDEZ DÍAZ Y FRANCISCO MARTÍNEZ

También ha apuntado que convendría escuchar en el inicio de los trabajos a la cúpula de Interior cuando sucedieron los hechos, es decir, al menos a Fernández Díaz y a quien fuera su ‘número dos’, Francisco Martínez, quien, ha resaltado el socialista, es quien está haciendo «acusaciones muy preocupantes» sobre este asunto.

Los seis grupos que ya han avanzado sus peticiones de comparecencia (Vox, Cx, ERC, Junts, Bildu y PNV) coinciden en reclamar la presencia del ex comisario de la Unidad Central de Apoyo Operativo (UCAO) Enrique García Castaño, pero también el excomisario José Manuel Villarejo.

Preguntado si Villarejo debe estar en esa primera tanda de comparecientes policiales, Sicilia ha insistido en que el PSOE «no se va a oponer» a que comparezca «toda persona que tenga algo que decir para arrojar luz». «Queda abierta la posibilidad de que pueda venir cualquier otra persona», ha añadido, incidiendo en que se irán pidiendo más comparecencias conforme avancen los trabajos.

Desde Unidas Podemos, Santiago ya dejó claro el pasado miércoles que, a su juicio, la comparecencia de Villarejo, que habían reclamado hasta ese momento, ya no era tan urgente, dada su falta de «credibilidad». Por eso no planean incluirle entre los primeros comparecientes.

VOX: ESTO EMPIEZA MUY MAL

Pero Vox, Ciudadanos, ERC y Bildu han insistido este viernes en que es ineludible interrogar a Villarejo. «Esto empieza muy mal, hemos sabido que Podemos ha decidido salvar tanto al PSOE como al PP impidiendo la comparecencia de Villarejo cuyo testimonio es vital para la finalidad de esta comisión», se ha lamentado la portavoz de Vox en la comisión, Macarena Olona.

De su lado, el representante de Ciudadanos, Miguel Gutiérrez, ha mostrado su extrañeza por el hecho de que los impulsores de la comisión «digan ahora que Villarejo no tiene nada que decir», mientras que Jon Iñarritu, de Bildu, ha insistido en que deben comparecer todas las personas que hayan tenido algo que ver con este caso.

En la misma línea se ha pronunciado el portavoz de ERC, Gabriel Rufián, para quien no se entendería los grupos que apoyan al Gobierno al final caigan en la «tentación» de «vetar» la presencia del excomisario. «Si Villajero no viene es como si Corleone no fuera al estreno de ‘El Padrino'», ha remachado.

«Tenemos que citar al perejil que está en todas las salsas putrefactas y en todas las cosas oscuras del Ministerio del Interior», ha señalado, por su parte, el diputado de Compromís, Joan Baldoví, quien espera que PSOE y Unidas Podemos se avengan a llamarle.

En términos similares se ha pronunciado en las redes sociales el portavoz de Más País, Íñigo Errejón: «Una comisión sobre las cloacas sin Villarejo es como una comisión sobre la mafia sin Al Capone», ha escrito en Twitter.

EL PP NO TEME NINGUNA COMPARECENCIA

Tras la reunión, el portavoz del PP en la comisión, Luis Santamaría, ha acusado a los partidos del Gobierno de convertirla en un «auténtico trágala» y una «causa general» contra su partido, de querer «hacer trampa» y de no admitir ninguna modificación en su plan de trabajo.

«Es un proceso inquisitorial en que PSOE y Podemos juegan con todas las cartas marcadas y los ases en la manga», ha dicho, remarcando, eso sí el PP no tiene «ningún temor» y por eso ha pedido que no se vete ninguna comparecencia. «A quien le tiemblan las piernas y le castañean los dientes es al PSOE, que propone que sean sus votos mayoritarios en la mesa los que decidan quién puede o no comparecer», ha añadido.

El PP había pedido que las comparecencias no se celebrasen hasta después de las elecciones catalanes y sólo cuando el juez instructor del sumario, Manuel García Castellón, y los servicios jurídicos de la Cámara hubieran resuelto una serie de cuestiones previas. Además, demandaban que los interrogatorios a los investigados en el sumario fueran a puerta cerrada y garantías de que no se difunden documentos reservados.

Sicilia le ha replicado que su plan de trabajo ha salido adelante sin apenas oposición y que la única intención del PP era «poner excusas» y retrasar el inicio de los trabajos pidiendo informes sin «sentido». «Esto no es ninguna causa general», ha zanjado por su parte Enrique Santiago.