La pobreza severa en España podría aumentar en casi 800.000 personas por la Covid

La pobreza severa podría aumentar en España en 790.000 personas y llegar a 5,1 millones como consecuencia de la pandemia de la Covid-19, según el informe anual de desigualdad que publica la ONG Oxfam Intermón con motivo del Foro de Davos.

Según el documento, el total de personas en esta situación, que son las que viven con menos del equivalente a 16 euros al día, podría alcanzar la cifra de 5,1 millones de personas, lo que supone un aumento desde el 9,2% registrado antes de la pandemia hasta el 10,9%.

«Los datos demuestran cómo la pandemia se ha cebado con las personas más vulnerables», ha declarado el director de Oxfam Intermón, Franc Cortada. «Sin una respuesta adecuada, hay un grave riesgo de que la salida de la crisis profundice y eternice las desigualdades en España, empobreciendo a las personas más pobres mientras las más ricas se recuperan a paso firme», ha añadido.

De los datos se desprende que la tasa de pobreza relativa en España pasaría del 20,7% hasta el 22,9%, lo que supone un millón de personas más por debajo de la línea de pobreza, estimada en 24 euros al día, hasta alcanzar los 10,9 millones de personas durante el 2020.

Además, según el informe, el decil de personas más pobres en España perdería, proporcionalmente, hasta siete veces más renta que el decil más rico.

En todo caso, la ONG señala que «los ERTE pueden haber evitado que más de 710.000 personas hayan caído en la pobreza» por lo que indica que esta medida ha sido «esencial» para limitar el incremento de la pobreza y la desigualdad, con una reducción estimada de 1,17 puntos en el índice de desigualdad de Gini.

EL DESPLIEGUE DEL IMV

También estima que si el Ingreso Mínimo Vital (IMV) se hubiera implementado en su totalidad –por el momento ha llegado a 160.000 de los 850.000 hogares previstos–, habría salvado de la pobreza a 277.000 personas, habría reducido la pobreza severa en 230.000 personas y el índice de Gini se habría reducido en 0,5 puntos.

Por comunidades autónomas, el informe pone de manifiesto que Baleares sería la más afectada por el incremento de la pobreza (hasta un 19,6% más de personas en pobreza relativa) seguida por La Rioja y Navarra. En números absolutos, el mayor incremento de personas por debajo de la línea de pobreza relativa se produciría en Andalucía, con más de 270.000 personas, seguida por la Comunidad de Madrid y Cataluña.

Atendiendo a la población migrante, Oxfam señala que el índice de pobreza entre estas personas alcanzaría el 57%, frente al 22,9% de media del total de la población; y añade que quedan en situación especialmente vulnerable las 300.000 personas trabajadoras en situación administrativa irregular, cuyos empleos se concentran en sectores particularmente afectados por los cierres de actividad.

Según el estudio, los sectores sometidos al cierre durante el año 2020 mantienen un salario anual que, de media, supone un 60% del salario mediano en España, mientras que aquellos sectores que han podido teletrabajar durante los cierres mantienen unos salarios un 140% superior al salario mediano.

Junto a los migrantes, Oxfam indica que los jóvenes y mujeres son los colectivos más afectados por la desigualdad que ha provocado la pandemia. Entre las personas jóvenes, esta desigualdad en los ingresos salariales aumentó 1,6 veces por encima del promedio, mientras que la tasa de desempleo llega al 55% entre las personas menores de 20 años.

Las mujeres, por su parte, constituyen el 57% de todas las personas subempleadas y el 73% de las que trabajan a tiempo parcial, según añade la ONG. «Mujer joven, migrante, con bajos estudios y perteneciente a un colectivo racializado. Ese sería el perfil más vulnerable ante los efectos de la pandemia», ha explicado Franc Cortada.

Ante esta situación, la ONG propone una serie de medidas como políticas de empleo alternativas para sustituir a los ERTES, apoyo a las empresas que garanticen empleo digno y medidas que regulen la temporalidad, parcialidad, subcontratación o falsos autónomos y que protejan a los colectivos más vulnerables como trabajadoras domésticas y migrantes.

También pide ampliar la cobertura del IMV, «agilizando trámites y requisitos y con especial foco en la reducción de la pobreza infantil»; una «reforma fiscal que recaude de forma más progresiva y que luche contra la evasión y la elusión fiscales», y un uso de los fondos europeos para la recuperación «con mirada transformadora y enfocada a reducir la desigualdad».

LOS MÁS POBRES NECESITARÁN UNA DÉCADA PARA RECUPERARSE

Por otro lado, según el informe internacional de Oxfam ‘El virus de la desigualdad’, también publicado este lunes, a nivel mundial, «las mil mayores fortunas del mundo ya habían recuperado las pérdidas económicas originadas por la pandemia», mientras que «los al menos 200 millones de personas que según el cálculo del Banco Mundial podrían haber caído en la pobreza por la pandemia necesitarían más de una década para recuperarse».

Según la ONG, si los gobiernos lograran reducir la desigualdad en el mundo en un 2% anualmente, conseguirían salvar de la pobreza a esos 200 millones adicionales en tres años en lugar de en una década.

También precisa que, desde el inicio de la pandemia, «la fortuna de los 10 hombres más ricos del mundo ha aumentado en medio billón de dólares, una cifra que financiaría con creces una vacuna universal para la Covid-19 y que garantizaría que nadie cayese en la pobreza como resultado de la pandemia».

Al mismo tiempo, precisa que la pandemia ha desencadenado «la peor crisis laboral en más de 90 años», y que tiene «el potencial de aumentar la desigualdad económica en prácticamente todos los países del mundo al mismo tiempo, una situación sin precedentes desde que empezara a registrarse este tipo de datos hace más de un siglo».

Por ejemplo, Oxfam indica que en Brasil, las personas afrodescendientes tienen «un 40% más de probabilidades de morir a causa de la Covid-19 que las personas blancas»; y añade que en los Estados Unidos, «si la tasa de mortalidad de las personas de origen latino y afroamericano hubiese sido la misma que la de las personas blancas, aproximadamente 22.000 personas negras y latinas aún seguirían con vida».

También apunta que «las zonas más pobres de países como España, Francia e India presentan tasas de infección y mortalidad más elevadas» y expone el caso de Inglaterra, donde «las tasas de mortalidad de las regiones más pobres duplican a las de las zonas más ricas».

En este contexto, desde Oxfam Intermón piden a los gobiernos mundiales que «garanticen un acceso universal a las vacunas contra la Covid-19 y a prestaciones por desempleo para las personas que pierdan su trabajo».

«Deben invertir en servicios públicos y sectores con bajas emisiones de carbono para crear millones de empleos nuevos; asegurar el acceso del conjunto de la población a servicios de salud, atención social y educación de calidad. Para ello, deben garantizar que las personas y empresas más ricas paguen los impuestos que en justicia les corresponden», ha zanjado Franc Cortada.