Podemos presiona al PSOE para que la hemeroteca no ‘electrocute’ a Iglesias

La ‘maldita hemeroteca’ está destrozando al Gobierno central a cuenta del recibo eléctrico. En Twitter le ponen la cara colorada a Pedro Sánchez, que hace seis años decía que «la subida de la luz del 8% prueba el fracaso de la reforma eléctrica de Rajoy, y alerta del riesgo de más gente sufriendo pobreza energética».

Pablo Iglesias en 2017 iba por el mismo camino: «Disparar la factura de la luz un día como hoy solo demuestra la codicia de las eléctricas. Si el Gobierno lo consiente, será cómplice». Y ese mismo año Alberto Garzón apuntaba alto: «Ola de frío y otro pico de subida del precio de la luz. Hemos pedido a la CNMC que investigue si ha habido irregularidades en el mercado».

El hoy ministro de Consumo decía que «el gobierno dijo que la luz subiría un 0,9%, luego un 2,8%. Finalmente es más de un 11%. Nos gobierna un partido vasallo de las energéticas». ¿Qué dice ahora Garzón después de que la factura se haya disparado más de un 30% en una primera quincena de enero marcada a nivel meteorológico por la borrasca ‘Filomena’?

¿GOBIERNO INDECENTE?

Ojo a lo que escribía hace cuatro años Alberto Garzón: «Esta navidad la luz tendrá un precio un 10% superior a la del año pasado. Miles de familias no podrán mantener sus casas a temperaturas adecuadas, lo que repercutirá gravemente en la salud de los que menos tienen. Ningún gobierno decente debería tolerarlo».

Por su parte el PCE, que es parte de Unidas Podemos, aseguraba en su XX Congreso que entre sus objetivos estaba la «desprivatización de los sectores estratégicos de la economía: banca, energía, agua, telecomuni­caciones, comunicación, gran distribución de alimentos, y del conjunto de los servicios públicos: educación, sanidad, servicios sociales y demás servicios básicos».

«ESCÁNDALO»

Pablo Iglesias en el programa ‘Salvados’ optó por soñar en alto en vez de asumir responsabilidades: «A nosotros lo que nos gustaría tener es una empresa pública de energía. La privatización de Endesa fue un escándalo. Creo que con una empresa pública de energía se podría limitar el oligopolio eléctrico, se podrían evitar situaciones como las de la Cañada Real».

El vicepresidente segundo admitió que «es una obligación del Gobierno que se ponga las pilas» y admitió ser «consciente de que una empresa pública de energía no la vamos a conseguir, porque eso lo quiere Unidas Podemos y no el PSOE».

El presentador de ‘Salvados’, Gonzo, le dejó en mal lugar: «¿Por qué durante un año no han hecho nada para prevenir esta situación? ¿Por qué no se bajan los impuestos, por ejemplo, el IVA en la factura de este mes? ¿Firmaron un acuerdo que no se puede cumplir?».

A Iglesias le faltaron respuestas y aseguró que «para que se cumpla un acuerdo de Gobierno, Gonzo, hace falta presionar incluso dentro del Gobierno«. El líder morado dice que «se puede nacionalizar una empresa eléctrica, solo hace falta voluntad política». Y explicó que «el PP nacionalizó un banco».

Pablo Echenique, de Unidas Podemos, dice que el eléctrico es «un mercado ineficiente que daña la economía de este país todos los días, con frío o con calor, y que agudiza las consecuencias de la pobreza energética. El acuerdo de gobierno para eliminar los beneficios caídos del cielo debe cumplirse».

ABRIL EN EL CALENDARIO

El Ministerio de Transición Ecológica comandado por Teresa Ribera prepara un nuevo sistema tarifario que podría ponerse en marcha a partir del 1 de abril. Esta nueva metodología se adaptará al pacto de Gobierno firmado por el PSOE y Unidas Podemos.

En el acuerdo se dice que se adoptará «un plan nacional integrado de energía y clima, la reforma del mercado eléctrico y la bajada de la factura, como principales instrumentos para complementar y desarrollar la ley».

El plan, según el pacto, favorecerá «la transición hacia la descarbonización y unos precios asequibles para el consumidor y las empresas» e impulsará «las normas legales necesarias para reformar el mercado eléctrico».

Una de las intenciones del pacto, según ambos partidos, es «acabar con la sobrerretribución que reciben determinadas tecnologías que fueron instaladas en un marco regulatorio diferente, anterior a la liberalización y que han recuperado sobradamente sus costes de inversión».