El candidato del PSC a las elecciones catalanas, Salvador Illa, ha asegurado este viernes que si gana las elecciones del 14 de febrero se someterá a un pleno de investidura para formar un Govern que esté cerca de la gente: «No me iré como han hecho otros».
Así se ha pronunciado durante su intervención en un acto telemático de campaña en el que ha explicado sus propuestas para el mundo local, junto a la cabeza de lista por Girona, Sílvia Paneque, y la alcaldesa de Sabadell (Barcelona), Marta Farrés.
Lo ha dicho en referencia a la trayectoria de la líder de Cs, Inés Arrimadas, que consiguió ganar las pasadas elecciones del 21 de diciembre de 2017 pero no optó a la investidura.
Illa ha afirmado que no concibe una presidencia de la Generalitat sin los valores municipalistas de la proximidad, el realismo, la gestión, la integración, la ambición y la cooperación, valores que ha explicado que ha asumido de su etapa como alcalde la Roca del Vallès (Barcelona).
Son valores que también ha visto durante su trayectoria como ministro de Sanidad, desde donde ha percibido el «papel extraordinario» del mundo municipal durante la pandemia del coronavirus.
Para el candidato socialista, es prioritario reconocer el mundo local, no como un adversario sino como una administración válida para articular Cataluña, al que quiere escuchar, y ha defendido que, si gana, su gobierno tendrá tres prioridades: proteger la salud, reactivar la economía e impulsar políticas sociales, especialmente en materia de vivienda y seguridad.
Su intención es garantizar recursos directos a las administraciones locales, y ha admitido que lo que más costará de revertir será el prestigio de las instituciones, que cree que se ha perdido en los últimos años.
«El mundo municipal es pieza esencial para que Cataluña deje atrás 10 años perdidos, de peleas estériles, con un gobierno bloqueado y paralizado, para que Cataluña termine con esta división y apueste por un reencuentro con los catalanes, españoles y europeos», ha sentenciado.
