El director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES), Fernando Simón, ha avanzado que el grupo de trabajo del plan de vacunación contra el COVID-19 está estudiando la posibilidad de no recomendar que los mayores se pongan la vacuna de AstraZeneca.
«Los ensayos clínicos no los ha realizado en personas mayores, con lo cual es muy posible que al no tener evidencia se recomiende para grupos más jóvenes que sí hayan formado parte de los ensayos», ha comentado este lunes en rueda de prensa.
De ser así, Sanidad se desmarcaría de la recomendación realizada el pasado viernes por la Agencia Europea del Medicamento (EMA, por sus siglas en inglés), quien optó por aprobarla en mayores de 65 años. Según Simón, tanto España como el resto de la UE podrían no seguir esta recomendación, alineándose con Alemania.
El portavoz de Sanidad durante la pandemia ha informado de que mañana se reunirá el grupo de expertos en vacunación, que «está trabajando en esta opción». «Habrá que ver a quién se aplica la vacuna o no», ha detallado. El miércoles, la Comisión de Salud Pública del Ministerio de Sanidad se pronunciará sobre la recomendación del comité. En cualquier caso, Simón ha defendido que «lo que no se va a hacer es perder una sola de las dosis».
El pasado jueves, el grupo de expertos que asesora al Gobierno alemán en materia de vacunación ha recomendado que la vacuna desarrollada por la compañía farmacéutica no se administre a personas mayores de 65 años por evidencia científica «insuficiente. En concreto, el Comité Permanente de Vacunación del Instituto Robert Koch de Alemania (STIKO, por sus siglas en alemán) señaló en un comunicado que «actualmente no se dispone de datos suficientes para evaluar la eficacia de la vacuna a partir de los 65 años». «La vacuna de AstraZeneca, a diferencia de las vacunas de ARNm, solo debe ofrecerse a personas de 18 a 64 años en cada etapa», estableció el organismo.
NO PARTIDARIO DE SANCIONAR A QUIENES SE VACUNAN ANTES DE TIEMPO
Simón no se ha mostrado partidario de sancionar a quienes se han vacunado antes de tiempo. «Cuando vacunas no se pueden perder dosis, en algunas situaciones es normal que se vacuna alguien que no sea del grupo», ha detallado, ejemplificando algunas situaciones en las que «llega el final del día y sobran una o dos vacunas». «Otra cosa es que se desvíen viales completos de los grupos a los que hay que vacunar a otro grupo, eso no es ético. Yo no digo si hay que sancionar, no es mi función, pero desde luego eso no es ético», ha puntualizado.
No obstante, Simón ha agregado que no se debe «añadir un error sobre otro». Así, ha justificado que no poner la segunda dosis a una persona que ya se haya vacunado no es una sanción sino un mal uso de recursos públicos de un bien limitado como son actualmente las vacunas contra el coronavirus.
Por último, Simón no se ha pronunciado sobre la propuesta de la Comunidad de Madrid de que camareros y taxistas sean considerados grupos prioritarios para la vacunación. «No sé si tengo que opinar sobre eso», se ha limitado a decir de forma jocosa.