Almeida sale al rescate de los «tresmileuristas» y despierta la ira de la izquierda

El alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida, ha conseguido reventar en cuestión de semanas esa imagen de hombre de acuerdos que había erigido durante su legislatura. El regidor se ha tirado a «rescatar» a aquellos núcleos familiares madrileños que tengan unos ingresos de entre 32.000 y 88.000 euros brutos anuales. De hecho, el alcalde considera que este colectivo, que puede llegar a cobrar, en caso de ser una pareja, hasta 3.000 euros netos al mes por persona, «tiene problemas socioeconómicos», algo que ha despertado la ira y la indignación en la izquierda, que asegura que el alcalde ha dejado atrás a los más vulnerables para apoyar a los que más tienen. «¿Cómo se puede considerar que alguien que cobra 3.000 euros al mes tiene problemas económicos?», detallan fuentes de la oposición.

Parece que a Almeida se le acaba la racha. Primero fue su comentario defendiendo que el Jemad (y por extensión todos los dirigentes políticos) se saltara el protocolo del Ministerio de Sanidad para vacunarse. Y ahora, el alcalde ha decidido lanzar una ayuda para el alquiler a las rentas de entre 32.000 y 88.000 euros brutos anuales. El regidor ha aprobado un plan de alquiler dotado con 30 millones de euros públicos que tiene el único objetivo de «aumentar la oferta de vivienda y que los inquilinos obtengan condiciones más asequibles para acceder a ellas». Vamos, apoyar a las clases medias sin lanzar un plan de ayudas similar para las clases más precarias.

Esta medida, de sobra conocida, ha indignado profundamente a la oposición. Pero no solo eso. Hasta los economistas liberales como Juan Ramón Rallo se han quejado de que esta medida solo beneficiará a largo plazo a los propietarios de viviendas. «El Ayuntamiento de Madrid ha aprobado un «bono vivienda» para ayudar a pagar el alquiler a familias que ingresen entre 33.200 y 88.200 euros anuales. Un subsidio que encarecerá los alquileres y engordará la cuenta corriente de los propietarios de vivienda», ha comentado en su cuenta personal de Twitter el economista.

Lo que se pensaban en el gabinete de Almeida que sería una tormenta que pasaría rápido se ha convertido en la Filomena política del alcalde. «Las ayudas al alquiler de Almeida no son ayudas a los inquilinos que entran en la horquilla, es una paguita que beneficia a los propietarios. Pretende ser un dique que impida a inquilinos negociar el precio a la baja en un contexto en el que podrían bajar mucho», ha asegurado el diputado de Más Madrid Jorge Moruno. «La ofensiva de Almeida y Ayuso en materia de vivienda está siendo brutal. Ayer, Almeida anuncia ayudas al alquiler para personas que cobran 3.500€ al mes ( para que no bajen los alquileres ) y hoy un nuevo pelotazo ¡con la necesidad que tenemos de vivienda social y protegida!», ha comentado la diputada de Podemos Carolina Alonso.

En el Partido Popular no critican la medida de Almeida, pero sí que dejan entrever cierto malestar por cómo el alcalde ha descuidado su efecto. Hace meses que ya no está de moda entre los políticos de la oposición hablar bien de Almeida. Ahora, el alcalde no hace más que coronarse cada vez que se planta ante las cámaras. Desde Filomena, el regidor no acaba de levantar cabeza. Primero por el comentario de las vacunas, algo que ha despertado la ira de dirigentes del propio Partido Popular. Y ahora porque ha conseguido convertirse en el objetivo de toda la oposición por anunciar ayudas para núcleos familiares que ingresan hasta 88.000 euros anuales. Más que el presidente del Gobierno.

Hay en Génova quien asegura que Almeida anda sobre una nube de la que no ha bajado desde el primer momento en el que le aplaudieron desde los balcones al pasear por la calle, pero lo cierto es que ese consenso del que presumía urdir el Partido Popular de la capital se ha perdido desde el mismo momento en que ha decidido anunciar ayudas covid para los que tienen un sueldo elevado. «Creerse que la pareja que ingresa 88.000 euros anuales es clase baja es un disparate», comentan las fuentes de la oposición madrileña consultadas.

«¿La solución de Almeida para la crisis de vivienda en Madrid? Subvencionar el alquiler a aquellos jóvenes que doblen el salario medio. Demencial», se ha preguntado el portavoz de Más Madrid, Pablo Perpinyá.