Castilla-La Mancha mantiene de momento el toque de queda, el cierre perimetral y la hostelería

El consejero de Sanidad del Gobierno de Castilla-La Mancha, Jesús Fernández Sanz, ha confirmado que la región mantendrá de momento en vigor las medidas restrictivas para aplacar la situación sanitaria, lo que supone prolongarlas más allá de lo previsto, ya que la actual orden tenía vigencia hasta este domingo.

En rueda de prensa tras el Consejo de Gobierno extraordinario celebrado este viernes, Fernández Sanz ha apuntado que si bien los datos van mejorando, lo hacen «muy despacio». Preguntado por cuándo se levantarán estas restricciones y por si la prórroga vuelve a ser de diez días, ha dicho que se monitorizarán los datos, pero se pretende acortar esta situación «lo máximo posible».

Tras hacer un repaso cronológico del avance del coronavirus en el mes de diciembre, ha recordado que el 18 de enero, día que se decretaron estas medidas restrictivas, había 1.008 casos por cada 100.000 habitantes.

Con las primeras medidas se estabilizaron al alza los datos, aumentaron las camas de hospital ocupadas, se elevaron las UCI con pacientes COVID hasta superar las 200 y empezaron a aparecer brotes en residencias de mayores, por lo cual se reeditaron las medidas durante 10 días más en una orden que está en vigor hasta el próximo domingo.

En este segundo periodo de 10 días, ha precisado Fernández Sanz, van mejorando los datos, descendiendo el número de nuevos casos, se doblega la barrera de los 1.000 casos por cada 100.000 habitantes por primera vez desde ayer, se mantienen 1.370 camas ocupadas y aún hay 240 camas de UCI ocupadas, «el mismo nivel varios días seguidos».

La situación en residencias mejora y ya son sólo 90 centros y cerca de 800 residentes los contagiados. «Estos son los datos que nos hacen mantener las mismas medidas. La bajada se está instalando, pero despacio, y necesitamos más tiempo, firmeza, sinceridad y transparencia en los datos para tomar estas decisiones».

ALEJARSE DE LA HIPOCRESÍA, QUE TIENE «CONSECUENCIAS MORTALES»

Ha pedido el consejero alejarse de la «hipocresía», ya que puede tener «consecuencias mortales». «No nos arrugamos en tomar decisiones con firmeza pensando en las personas, principalmente», ha aseverado.

Con todo, ha asegurado que también se repara en «la fatiga» de los profesionales sanitarios, los cuales «piden a diario mantener estas medidas».

«Esto no se toma sólo con arreglo a los datos, que como ven son contundentes aunque estemos a la baja. Creo y confío que manteniendo esta responsabilidad, la semana que viene serán mejores datos. Es el momento de seguir manteniendo restricciones de este nivel», ha apuntado.

Tras recordar que la tasa por cada 100.000 habitantes sigue rondando los 1.000, es oportuno mantener las restricciones, ya que «sería incongruente relajarlas, si las tomamos cuando estábamos igual».

Hoy hay «los mismos pacientes en las camas» que antes de Navidad, si bien ha puesto en valor que el refuerzo de la Atención Primaria y su «labor impresionante» han conseguido que sólo el 25% de pacientes que llegan al hospital se queden ingresados.

Eso sí, «si los datos confirman la bajada que se espera», el Gobierno regional será el primero que tomará decisiones de «flexibilizar las medidas» que hoy se han prorrogado.

LA CEPA BRITÁNICA AMENAZA EL MES DE MARZO

«Estamos en situaciones difíciles, conocemos el virus pero a las puertas tenemos cepas que aún no son tan conocidas, en pleno estudio a nivel mundial», ha avisado Fernández Sanz.

Esto, ha dicho, «aventura a pensar que aunque hoy, todavía, la cepa británica no está instalada en un porcentaje alto, podría ocurrir que marzo sea un mes complicado» por su culpa. En la región son sólo, de momento, una docena de casos registrados de esta cepa.